vivir de sus rentas y su cuerpo,
de su sonrisa.
Amenaza con cumplir sus amenazas,
con amar hasta las asaduras, solo si la aman.
Amenaza con ser fría y salvaje,
si su macho no responde.
Como Amantis copulando, amenaza
con devorar a todos los que no huyan.
Corre o se valiente.
Descúbreme en el momento del ataque y relaja mi mandíbula con un beso.
No temas, solo estás en peligro de muerte.
Hola lengua!! no sé ni como te he descubierto, pero me encanta haberlo hecho.
ResponderEliminarMe enganché a tus escritos, entiendo y siento mías cada una de tus palabras y cada uno de tus sentimientos.
Seguiré leyendo!!
Un beso enorme desde Gerona!