viernes, 30 de mayo de 2014

MIS FRACASOS FAVORITOS

Voy a terminar todos mis fracasos. Yo siempre termino, mejor o peor, todo lo que empiezo. Mis fracasos con más motivo.Voy a establecer un horario organizado, por ejemplo:

Mensualmente sacaré uno de mis capítulos del famosísismo autiolibro grabado en valencia, que nada más escuchar mi voz hice mandar callar. El próximo mes, sacaré el capítulo uno, ¿junio? Si, en junio escucharéis el capítulo uno de Exhaustos, uno de mis grandes fracasos.

En este mes tengo que tener sitio donde dormir en el campo. Va a ser un tipi y no lo haré yo, pero el gran fracaso en el que llevo invertidos todos estos meses, debe continuar. Eso es fácil, un pedido por Internet, y una vez tenga techo, no me bajo del barco.

Dibujaré, cuando las fuerzas no me acompañen para construir, mi propio cuerpo desnudo.Es lo que me falta para terminar mi fracaso número … ¿número? Imposible hacer recuento de todos mis fracasos.

Participaré en actividades de la asociación de vecinos que ampara a la zona de la Piscifactoría de los Cañones, a la que pertenece mi barco. 

¡Otro de mis apoteosicos fracasos!

Solo puedo empezar a contactar con otras personas que aman esa tierra como yo, se que hay plataformas y mucho ecologista en el tema, pero yo, me voy a lo de toda la vida, a las asociaciones de vecinos. Se que soy muy roja para una zona tan elitista, pero al final me quieren, sea del color que sea total, como Franco, yo también tengo el culo blanco.

Ya está, no escribo más, que como saque la larga lista de fracasos que tengo pendientes, os váis a reír más de la cuenta, aunque os recuerdo el dicho de “quien ríe último ríe mejor” y yo, aún no me he muerto.

Me voy, que ya está bien por hoy.

Ah!! Se me olvidaba, y los niños del mi barrio, que son los únicos que aún tienen remedio, siguen campando por sus anchas cerca de la casa, este fracaso, me refiero al GRUPO MIL, lo dejo para más adelante, que me ponen la cabeza loca los míos y allegados, cuando los críe un poco más y sea más vieja.


jueves, 29 de mayo de 2014

LA RECONSTRUCCIÓN

Y le vi un poco la piel al lobo. Bajo su manta de lana, se esconde el malo. Observar, esperar, actuar despacio en la oscuridad. Trabajando en mil túneles subterráneos que terminen por hacer caer los cimientos hasta dejarlo todo solar.

¿Vivir y dejar vivir?


No, morir matando.

ÚTILES LOCURAS

Yo perdí un poquito la cabeza, si. Me reconozca loca perdía ahora que estoy más cerca de la cordura, pero que lástima esa gente que nunca, jamás, en su vida, perdió el norte. Jamás dejó de hacer sus mismas cosas diarias, sus mismos recorridos en coche, las mismas compras con su misma tarjeta en sus mismos supermercados y que para cambiar de aires iban siempre al mismo lugar de vacaciones.

¡Qué lástima, que insípidos, parece que vinieran a esta vida obligados!

¡Qué pena los que cuando mueran pueden resumir su vida en un año y así sucesivamente! Para mí sería imposible, no se ni lo que hice el año pasado. Pierdo el norte en casi cada cosa que hago. Todo parece una locura ahora que lo pienso.

Escribí un libro, que es una locura de leer y que ya nadie puede comprar, y sobre todo, me da vergüenza regalar, es una pena la cabecica como la tenía cuando lo escribí.

Peleé durante un tiempo por un sueño, sigue guardado en mis sesos, pero no puedo contar que yo, me veo capaz de organizar a las personas que no sean tontísimas para hacer cosas útiles para todos. 

martes, 20 de mayo de 2014

¡HE TRIUNFADO!

Tengo la sensación de fracaso mezclada con la de un gran triunfo. Fracaso por no haber levantado de golpe y de la nada un proyecto casi imposible, por no haber terminado aún mi audiolibro, por dejar a medias Retahíla, tantas y tantas cosas que se agolpan en mi búfer, en espera de que les de paso. No se organizarme.

No me conformo con la actividad de un humano,  aunque al menos por las mañanas he vuelto al trabajo de una persona normal. De ahí viene mi sensación de triunfo. Hago totalmente responsable a la suerte y quizás al cariño que me tiene la gente que me rodeaba en mi trabajo. Me han hinchado de abrazos, yo también he dado unos cuantos.  

Todo esto me ayudará a engordar un poco y sobre todo me dará paz para seguir adelante con todas mis locuras, para que cuando nadie se lo espere presente de golpe los frutos de mis actividades extraordinarias.

Ayer no pude regar mi huerta, hoy si. No va a ser fácil pero yo tengo la cabeza muy gorda y tengo que hacerlo por Vacarisa, necesita un hogar. Esta casa no está hecha para ella, necesita tierra bajo sus pezuñas. Me encanta hacerla rabiar y que me muerda más fuerte de la cuenta los dedos de los pies cuando voy descalza, para pegarle gritos y golpearle palmotazos en ese culo tan erótico que tiene.

Corre asustada, parece que dijera: perdón, perdón, perdón – en idioma cerdil.

Se que nadie entiende el cariño que nos tenemos, no comprende como puedo echarme de carga un animal que come más que una pupa viva y que me hace ir una y otra vez a pedir sobras al bar de unos amigos.

Pero es que yo la quiera a ella. Me guste tocarle las tetitas tan suaves que tiene, me recuerde mi infancia hasta devolvérmela. Yo se que me quiere aunque todos penséis que solo lo hace por la comida.

sábado, 17 de mayo de 2014

Y EL DOMINGO DESCANSÓ

Hoy me golpeé la cabeza tan fuerte que me caí para tras y me clavé una linterna de hierro que llevaba junto con un tapón de un frasco de cristal metida en el bolsillo posterior de mi pantalón.

Mareada, pensé: Es una señal.

Que señal ni señal, es lo que llevo haciendo toda la vida. No se ni porque aún estoy viva, ya lo he escrito en otra ocasión. Quemaduras en la mano, putos en la otra, accidentes de coche, ahogamientos varios con el agua marina, hemorragias ... ¿Cómo es posible que Dios me mantenga viva con lo molesta que soy? Ya me conoce de tantas veces, al final se le coge cariño a las personas.

Tengo el pelo corto, empiezo de nuevo, la sensación de nuevo comienzo es clara. El lunes vuelvo a ser informática de día y constructora de noche. Entre medias tengo la música que llena cada día más mi cabeza de nuevos conocimientos.

Todo empieza a germinar de nuevo, como mi huerta. Comienza otro ciclo de mi vida, con mucha paz. Ya me da igual hacer cosas o no hacerlas. Escribir, no escribir, que me leáis que no lo hagáis. Ya todo eso no me importa.

Todo está terminado hasta ahora, todo lo que empecé antes, todo lo que tenía pendiente.

Tengo la casa terminada, a falta de miles de millones de detalles, comienza una carrera a largo plazo.

Pido disculpas, lo siento, necesitaba ser libre.

miércoles, 14 de mayo de 2014

MI EXÍN CASTILLOS

Admiro a la gente que es constante y capaz de hacer durante años la misma cosa. Especializarse, aprender cada día más…

Yo simplemente, me aburro.

Me aburro, me aburro, me aburro, me aburro y me aburro.

No puedo evitarlo, de pronto se me va el entusiasmo y no hay forma de levantarlo. Es un gran gatillazo. Se que debería especializarme y potenciar cualquiera de mis habilidades y quizás me ganara la vida incluso, o al menos unos ingresos extras que falta me hacen. Pero no puedo. Me aburro.

Lo hago mal, lo se, solo hay que ver la gente que sabe escribir. Digo tonterías sin sentido, emito sonidos con letras que son en algunos casos incomprensibles hasta para mí misma. Lamentable, soy un ser lamentable pero genuino. No hay otro ser parecido a mí. Puede asemejarse, pero es más inteligente seguro. Actúa en su beneficio, no se daña a si mismo, aprovecha sus oportunidades, rentabiliza su tiempo.

Yo lo pierdo en cosas tan absurdas como ilusionantes. Cosas que la mayoría de los adultos desaprueban, pero que todos los niños del mundo sueñan con que pueda realizar.


lunes, 12 de mayo de 2014

LA MALA FE

Todos los políticos son iguales, todos los partidos una falsa, los sindicatos no nos representan, yo no voto, que les den, yo ya no creo en nada…

Ni dios me salva a mí de la mala fe.

Estoy cansada de escuchar siempre el mismo mensaje. El mismo disco de vinilo una una y  otra vez. Por un lado “Los Pecos”, por el otro, también los mismos.

¿Qué hacemos? ¿Nos quedamos quietos?

Ya hemos puesto la otra mejilla, solo nos quedan los cachetes. Tenemos que estar agradecidos solo por poder sobrevivir. ¿Qué hacemos? En serio ¿nos resignamos? ¿Perdonamos? ¿Aceptamos la voluntad de Dios o la del pueblo?

Yo aún no me muerto, cuando lo haga que me echen las cuentas pero hasta entonces, que se espere sentao que estoy viva, no le tengo miedo y no se lo que es parar de luchar.

¿Qué hago? ¿Alguien me escucha? Luchemos con imaginación y picaresca, que vengan a mí los sinvergüenzas, que se olviden de la legalidad, que se la jueguen a diario los valientes.


Bueno, espero que las multas no sean muy gordas, pero a veces hay que pagar por un poco de libertad.