lunes, 28 de noviembre de 2016

ACORRALÁ


Cada día que leo las cosas que he escrito, me parecen más aburridas, más mierda. No entiendo de verdad realmente porque me lee la gente. Me gustaría dejarlo, como dice mi Paco, para hacer algo grande, algo que me divierta, o para no escribir más, solo hacer croché.
El croché me divierte, me deja la mente en blanco.
No escribo con libertad, en absoluto.

Me encantaría escribir cosas, que me gustara leer: Guarradas, borricadas, gritos pelados...

Pero, unas veces pienso que ofendo, otras veces que van a darse por aludidos, que encelarán, que pensarán esto y lo de más allá.
Estoy tocada, sonada mejor dicho.

Tengo un tirito dao, y bien dao.


Muerta.

Por todo ello, no cierro, porque no me importa que la gente se entretenga con estas tonterías, pero no escribo más.

Simplemente, no soy libre, solo escribo de forma condescendiente y correcta para todos, es como si eres cantante y te piden cada actuación, la canción más conocida.

Me aburro.

Quizás abra un nuevo blog, quizás con un nuevo nombre, quizás no escriba de nuevo, no sé, la verdad, nunca sé, lo que si sé es que no tienen ningún sentido escribir en un sitio que no me produzca consuelo.
El único objetivo de escribir, era, no hablar sola, últimamente hablo mucho sola, más de lo que debería, solo por un motivo, no tengo consuelo como antes con mi blog.
Me siento acorralá.
Que la pena hoy te invada sin motivo
No hay excusas no es el ciclo menstrual
hoy grítalo aunque no digas ni media
Tú no lo reconozcas, que estás mal.

Se puede ser más bestia que persona
Se puede ser más frágil que el cristal
puedes tener motivos para estarlo
y verte sin estarlo acorralá.

Si yo comprendo, si yo comprendo
Que no es cómodo, que ofendo.

A veces, mejor me callo.
A veces, mejor me aguanto.
A veces y solo a veces,
mejor mañana ni hablamos.

UN ABRAZO GRANDE QUERIDO BLOG, TE ECHARÉ DE MENOS.






viernes, 25 de noviembre de 2016

MI REALIDAD DISTORSIONADA


Mi realidad y la de los míos, siempre estará distorsionada, claro que sí. Mis hijos de sobra saben que soy rica, que siempre tengo un fajo de billetes escondidos debajo de una baldosa. Aquí estoy, en un hotel de lujo, con una cama que es lo mismo de larga que de ancha.

Mi verdad, siempre será buena, a mí todo lo que me pasará será bueno, y si algo malo o medio malo viene, será para bien, porque detrás y como consecuencia de este hecho, vendrá algo maravilloso.

Como un parto.

No creas que yo no sé cuándo se me va algo de las manos, cuando, alguno de mis sueños empieza a desvanecerse por imposible, pero no lo reconoceré.  Jamás.  

Prefiero morirme en el asilo diciendo que ya casi tengo terminada la granja, que me dejen salir para terminarla, antes de reconocer que la tengo abandonada desde que empecé con el libro de Miguel.

Yo misma me busco las escusas para justificarme, pero es cierto que ese sueño está de capa caída, que necesitaría un golpe de suerte, un poco de pasta fácil, para poder seguir poniendo ilusión allí arriba.

Ahora de momento, estoy descansando de viaje. La semana que viene, pretendo terminar mi quinta casa, con mis obras ilegales con cartón piedra. Digo yo, que casi no sería ni denunciable, porque yo a mis casas les meto un misto y todo vuelve a quedar como cuando lo encontré.

Que por cierto, no es una amenaza, pero por si acaso a alguien se le ocurre denunciarlas.

Además, no estaré allí para verlo, lo tengo todo calculado. En el momento que termine mi hipoteca, me meto en mi casa-furgo y me voy a vivir fuera de esas paredes. Siendo esto cierto, a ver a quien le notifican nada, a ver a quien buscan las cosquillas.

Esa es mi realidad, distorsionada, claro. Que escribo, cierto, que he escrito varios libros, cierto, que soy rica y una reina, cierto también. El que quiera, que venga y lo vea, y que se atreva a decirme que mi capa es una manta.

¡Que yo por mi realidad distorsionada mato! O por lo menos, pego cabezazos, que ahí nadie sabe quién pegó a quien.
Conste que hubo una semana que el blog se volvió loco con las entradas y parecía que de verdad el sueño se iba a realizar, el de ser una escritora de verdad. 
Al final me voy a tener que conformar con ser la reina.

lunes, 21 de noviembre de 2016

GRACIAS

Socialmente soy una carga, por el hecho de tener cuatro hijos y estar sola, encima trabajo solo a media jornada, que te voy a contar que tú no sepas.

Cualquier persona que aparentemente analice esta cuestión, llegará a la conclusión de que cualquier hombre que se me arrime, sufrirá la mayor de las desgracias.

Me duele lo mal visto que está ser yo. En todos los sentidos, aunque prefiero mi vida a la de miles de millones de seres humanos que son preciosos a los ojos del Señor.

Siento decir, aunque no se lo crea ni Dios, que no consiento ser una carga para nadie, por lo tanto, mis hijos no suman carga, solo yo los llevo, y a mí no me pesan.

Las personas que han estado a mi lado, tanto parejas como amigos y familiares, creo que no pueden nada más que decir que doy, incluso suerte.

Doy suerte señores, siempre por casualidades de la vida, la gente a mi lado se recupera emocionalmente, económicamente, encuentran novia o novio… les salen trabajos social-mente bien mirados, no como el mío.

Algunos, hasta se olvidan de felicitarme por Navidad después, porque nada me deben, todo fue un golpe de suerte como yo siempre les digo, aunque lo entiendo, yo tampoco felicito nada más que a las personas importantes de mi vida.

Si no te felicito este año por Navidad, no me lo eches en cara, coño, que estuvimos hablando hace un rato. Tampoco vale si tomamos café hace días. Ni si estuvimos de cañas, o arreglando algún asuntillo.

Hablo de la gente que hace miles de millones de años que no felicito, que no hablé con ellos en todo el año, que posiblemente no me felicitaron para mi cumpleaños ni yo para el suyo, que no se han enterado ni de que mi padre ha muerto, que no saben ni tienen porqué saber nada de mí, a no ser porque lean el blog o miren mi muro en silencio.

Yo también fisgoneo donde no me llaman de vez en cuando, sobre todo cuando el face me avisa de algún evento importante y veo como las vidas de los que pasaron por mi vida, son social-mente más bonicas que la mía, más de palmadita en el hombro del cura, más de medalla de honor.

A todos ellos, gracias por venir.

domingo, 20 de noviembre de 2016

NO PIENSES


Que si aquí no hay ná, que si está muy abandoná, que si no hay trabajo … la gente que se piensa, ¿que vamos a estar aquí mucho tiempo para perderlo hablando?

Dentro de nada estamos muertos.

Reescribiendo la historia de mi vida, para colgarla cuanto antes en el Amazon y ganar algo de pasta para seguir viviendo, me doy cuenta, de que hace nada que estaba haciendo los deberes en  casa de Don Antonio, un poco menos de lo de parir y un segundo desde que me divorcié.

Pasa la vida tan rápido, que  es absurdo plantearse nada que no sea, llegar a casa de pasar un buen rato con los amigos, comprobar que todos tus hijos están en sus camas y que mañana empieza de nuevo una nueva mañana, en esta ciudad de mierda.   

Plantearte si tu relación es satisfactoria, si tu ciudad, tu trabajo, tu nevera está funcionando, es absurdo.

¿Qué pasará cuando mueras?

Que todos tus planteamientos se irán al carajo.

¡Disfruta!

Disfruta del rato bueno en tu pueblo, en tu casa, con tus amigos, en la ciudad que sea, aunque estés trabajando lejos de tu familia, aunque no haya playa, aunque haga calor, o frio.

Piensa que en otros lugares del mundo, hará más calor o más frio. Piensa que otros follarán menos. Piensa, sinceramente, piensa y date cuenta, que dentro de nada, antes de que puedas pestañear, estarás muerto.

Una vez que muera, solo quiero, que todo siga fluyendo. Que por fin termine mi quinta casa y mi granja, que la utilicen muchas personas.

No me gustaría, ver como se abandona, antes, dejad que cualquiera lo utilice.

Son cuarenta y cinco, nada de tiempo desde que volví de Barcelona, en un ratito estoy en la cama, y en otro más en la caja.

No hablo en negativo, todo lo contrario, una vez muerto no te duele nada. Este texto en positivo es para que abras los ojos, que mires y que hagas tu nido donde sea, como los gorilas, que seas feliz estés donde estés, que vuelvas al inicio:

El mono, la mona, se cuidan y tienen monillos.

Un segundo hace en la historia del universo, que eso, estaba ocurriendo.

¿Qué es la vida de un ser humano?
¿Qué milésima de segundo corresponde con nuestra existencia?

VIVE y no pienses tanto, nena, que luego vas, y lo escribes.

martes, 15 de noviembre de 2016

MI ASILO


Hay personas que se mantienen en pareja porque piensan que el otro los va a cuidar hasta de viejo. No es cierto, eso era antes. Puede ser tu pareja para viajar, para estar bien, para salir por ahí, pero en el momento de la enfermedad y posterior muerte, no hay nada atado.

Puedes creer que tienes a tu lado a alguien que lo soportará, y que te acompañará, y cuidarlo fantásticamente, y cuando llegue el momento, que se venga abajo y se largue. A veces cuidas a una persona, conociéndola, sabiendo que muy posiblemente, él no lo haría por ti.

Que no se ofendan los hombres, pero es cierto que en muchos casos, gracias a la madre naturaleza, las mujeres son las que sobreviven, suelen cuidar hasta el final a sus hombres, al menos antiguamente, y luego de viejecitas, se cuidan solas, o las cuida otra mujer, habitualmente.

Por supuesto, todo esto está cambiando.

Es posible que alguien del que no esperabas nada, aparezca para ayudarte, por su propia forma de ser, por su conciencia, su personalidad.

Pero no es fácil que ocurra, no hay superhéroes que quieran cuidar de ancianos hasta el final de sus días, la vejez es sinónimo de soledad, por eso, yo he pensado que voy a fundar un asilo, un poco especial.

Mi asilo va a tener lista de espera infinita porque además va a ser barato. Va a ser barato porque no habrá médicos, aquí cuando te llegue la muerte te ha llegado. No vamos a comprar ni la máquina esa que están promocionando todo el día para reanimar a un muerto, ya me gustaría a mí saber quién las vende.

Los cocineros seremos nosotros, y  si le echamos tres veces sal con la demencia senil, seremos comprensivos.

Será solo para amigos, que es esto de aguantar a un plasta porque  ha solicitado la misma residencia, ni hablar, esto es solo para nosotros, y el que quiera, que se monte su asilo.

Los abuelos vendrán atraídos por nuestro bienestar, como en la peli de Guerra Mundial Z, y tendremos luchar para defender nuestro asilo o montar otro millón de asilos como el nuestro en todos los barrios, en todas las ciudades, en todo el mundo.

No penséis que este proyecto está en mi cabeza por azar, ni que está solo desde hace diez minutos, lleva conmigo al menos quince años. Conocí a unos abuelitos de mi barrio, que vinieron a la asociación de vecinos, porque querían que les ayudáramos a que la empresa pública del suelo les cediera unos solares del barrio en el APA3. No lo hizo, aún está hecho un solar precioso lleno de ratas, pero esta gente hace tiempo que inauguró su residencia en otro barrio, la Glorieta.

El que no es de aquí, no entiende ni le importa los lugares que menciono, pero me da igual, es un dato que quiero poner que le da veracidad a los hechos.

Bueno, pues, esta gente consiguió su residencia, no aquí en el barrio, pero al menos, dentro de un barrio. No están apartados del mundo como todos los asilos de ancianos, que se hacen para que nadie vea a los viejos, morir, en las terrazas.

Todos tenemos un miedo atroz a la muerte, todos no sé, yo ya no, porque he tenido muchas visitas, no sé nunca cuándo va a ser la definitiva, pero por norma, ver a un viejo moribundo no nos gusta a nadie.

Pues a nosotros nos van a ver, y nos van a oír.

En las excursiones va a ser obligatorio tirarse a la piscina desde los balcones, el último día, para aprovechar, y de ese modo, siempre dejaremos algún muerto en el camino.

El objetivo de la residencia será, morir dignamente y cuanto antes.

En nuestro asilo, todo estará permitido. Para lo que nos queda en el convento nos cagamos dentro. Podremos plantar terapéuticamente mucha mariguana, y a esas alturas de la vida, no nos debemos preocupar por la muerte de nuestras neuronas, si nos queda alguna.

Todo estará permitido, todo absolutamente lo que no dañe a nadie nada más que a uno mismo.

Esto es por ejemplo: el suicidio.

Estará permitido y asistido. Cualquiera de los que consideremos que ya ha llegado nuestro momento, podrá pedirlo en asamblea y entre todos lo matamos.

Cuando venga la policía, solo hay que contestar con una pregunta a todas sus preguntas y finalmente, se darán por vencidos, dirán que chocheamos de tal manera que para que más preguntas.

Nadie irá a la cárcel, porque ¿para qué?  Y si vamos, que más da, nuevos compañeros, lo pasaremos bien. Será como un cambio de asilo.

No sigo, no sigo, que luego dirán que yo fui la cabecilla, yo no he dicho nada de morir dignamente, he hablado de muerte y asesinato. Para qué pedir cosas civilizadas que llegarán a nuestra sociedad cuando ya estemos muertos, nosotros directamente utilizaremos una fórmula que ya está en nuestros días y desde el principio de los tiempos: el asesinato.

¡Hostia! ¿te imaginas a todos tus amigos intentando matarte en un asilo?

… uno subido a una escalera con una maceta, otro en la cocina haciendo pócimas, o galletas, el otro poniendo una trampa para osos en el jardín, o la huerta de la alegría, que seguro que hacemos unas tortillas fantásticas…

¿Quién se apunta?

UN BUEN TRABAJO

Uno puede creer que mi forma de educar es producto del azar, yo pienso que es más el instinto y la experiencia. Desde pequeña colaboré en muchas asociaciones juveniles, fui creciendo en un ambiente hostil, un polígono obrero en los años de la heroína. Aprendía cosas a cada segundo. Cosas muy importantes para abrirte camino en la vida. Esto, me hizo ser como soy, una gran manipuladora.

Todo el mundo maneja, todos, aunque solo unos pocos lo reconocemos.

No hay como ofrecer la libertada a un joven, para que sepa lo peligrosa que es y la respete, la utilice y le saque partido. Cuando hablo de joven, hablo desde lo más joven, desde un niño pequeño, muy chico.

Mi hija era muy pequeña, dos o tres añitos. Un día en el campo, encendimos un lumigas de aquellos que quemaban mucho. Le encantó la luz. La miraba y me miraba, muy pequeña. Fue a tocarla, y le dije que quemaba:

- No, que quema.
- ¿mema?
- Si, mucho, pupa.

Ella entendía perfectamente lo que yo le estaba diciendo, pero necesitaba saberlo, necesitaba tocar aquello. Yo, como madre mala que soy, me puse con otras cosas. Ella ya sabía, pero tenía libertad de hacer. A los pocos minutos, viene con el dedo rojo, sin llorar ni nada, afirmando y soplando:

-          Mema, mami, la lu, mema.

No le regañé. Enfrié su dedo, le puse cremita y no le regañé, ni lo lamenté en ningún momento. Le curé como el que hace otra cosa si importancia, como si le estoy limpiando los mocos antes de entrar al cole. Aquello, había sido necesario para ella, y nada tenía yo que reprocharle.

Muchos educadores piensan que no se les debe dejar solos, que hay que evitar estas cosas. Yo no. Pienso que sin estas experiencias negativas, no aprenderían. Es tan bueno un buen ejemplo como uno malo.

Es tan necesaria una mala experiencia como una buena. Solo rezar para que la mala no sea muy mala y que la buena, la recompensa, sea lo habitual.

Ellos deben saber que solo tú tomas las decisiones y tienes la responsabilidad, pero también que pueden  convencerte para que hagas lo que ellos dicen, siendo siempre razonables.

No le ofrezcas el NO por norma. No te preguntarán en el futuro, no te enterarás de la mitad.

Yo he hecho toda la vida lo que los niños me han ordenado, yo les digo que SÍ casi siempre, pero luego les fallo, salen las cosas mal. Con esto, aprenden a medir lo que piden.

Cuando les digo que hagan algo, lo acompaño de una frase, para ellos muy graciosa, pero que tiene mucha maldad;

-          Es una orden.

No es una pregunta, no admite discusión, no te lo cuestiones, hazlo.

En el momento en que ellos son conscientes de que yo también acepto órdenes, de que yo también soy capaz de hacer lo que ellos mandan y más, de que no se me caen las vestiduras por hacer cosas de niños, es a partir de ese momento que te admiten como un miembro más de su especie y se abren.

Entonces, es cuando más y mejor se manipulan.

He visto alguna vez programas de estos donde se educa a los niños, Super-nani, Hermano mayor…

Apuntan en una cartulina las cosas que deben conseguir, ofrecen premios y recompensas, negocian para que el individuo, ya en edad adulta o avanzado estado de descomposición, mejore en su comportamiento.

Es tarde. Si tu hijo necesita negociar, es tarde. Tu hijo debe obedecer órdenes sin rechistar.

Todos mis hijos y los niños que he conocido en mis distintas actividades sociales, son como son y no van a cambiar. Todos ellos necesitan, exclusivamente, atención continua desde su nacimiento.

No me vale que los dejes y luego te quejes. Que llames a la Super-nani, cuando se te ha ido de las manos, no vale que cuando ya todo está perdido, empieces con los parches, educar, es sencillamente una labor de desgaste.

Ellos están en blanco, no tienen aprendida ninguna norma social, ni lenguaje, nada.

Muchos dirán, esta mujer, que dice que sabe educar, con lo ordinaria que es, con los muchos defectos que todos conocéis, efectivamente, porque además los escribo.

Creo que sí, que he sabido educar, he creado seres muy libres, eso es cierto, no será fácil para ellos encajar porque cuestionarán todo, pero creo, que aparte de que ya nacieron siendo perfectos, lo poco que les he ayudado en la vida a ser mejores, a mis hijos y a los otros, ha sido un buen trabajo.

Claro que siempre habrá quien diga, todo lo contrario.

lunes, 14 de noviembre de 2016

ACCIÓN REACCIÓN


Mi casa es grande.
Puedes pensar que a mis hijos les doy demasiada libertad y espacio, que viven como si lo hicieran solos, que podrían descarriarse con toda facilidad, pero en ocasiones ocurre que pasa todo lo contrario. Personas posesivas que están encima de sus hijos cuidándolos como tesoros al final  consiguen que éstos se alejen. Es pura acción reacción.

Hago todo lo contrario y no consigo quitármelos de encima ni con espátula y agua caliente. Podría haber mucha intimidad en esta casa, pero al final, nada tienes porque donde estés, aparecen como moscas a la miel. También les ocurre entre ellos mismos.

Si ven que necesitas intimidad, te la dan, a veces después de unos cuantos gritos y algún que otro ademán de cortar cuellos o partir piernas, aunque casi siempre me dejan mi espacio, voluntariamente, solo con la amenaza de perder la paga.

Si se van es a estudiar fuera de la casa, es cuando te das cuenta de lo mucho que te gustaba aquello, cuando los puedes tener un día a todos juntos, como fue ayer, es cuando disfrutas.

Tienen apego entre ellos, mucho. Se quieren mucho mis hijos, a pesar de haberse criado en esta casa tan grande, con sus espacios independientes, con su vida independiente, con sus libertades.

Creo que a mí, también me quieren muchísimo, a pesar de los pesares, soy lo que les tocó en suerte de madre. Les he dado mucha guerra, y más que les tengo que dar, que aún no he terminado. Entre los disgustos, uno grande será no encontrar mi cadáver. No pienso dejar que me cuiden de vieja, tengo previsto desaparecer, para que ni el entierro les cueste pasta.

Cuando eran pequeños, de vez en cuando me preguntaban que cuando me iba a morir, siempre les decía que cuando estuvieran todos deseando. Espero que sea  de vieja muy vieja y después de fingir mi muerte varias veces, para que así la definitiva no les duela tanto.
Iba a contaros cual es mi plan B, lo del Asilo, pero  ya se ha terminado, porque han venido estas a meterse en mi cama, quieren que abra la peluquería MARICARMEN...

¡No hay quien las aguante! ¡Al final ni siesta ni ná!


viernes, 11 de noviembre de 2016

MI CHUMINO


Hoy en las cañas con las chicas, Victor, que es de Cai, Algeciras concretamente y que ya mismo está en "zu caza” que vuelve por Navidad para siempre, ha contado un chiste.
Yo pensaba que la gente de Cai tenía más gracia, para que luego digan de los de Jaén y Graná.
Como ya llevábamos más de una, nos ha hecho gracia, y él se ha puesto muy contento.

-          ¿Cuál es el cruce de uno oso y una hormiga?

-          Ya lo sabemos: un oso hormiguero, ¡qué que malo! – le decimos.

-          ¿Y un chucho y un minino?

Silencio y expectación.

-          Un chumino.

Hablemos de mi chumino.

Una vez una señora casada se puso muy celosa sin conocerme ni nada, porque cabía la posibilidad de que su maridito estuviera cerca y yo era una mujer divorciada. Esta mujer penaba que todas las mujeres divorciadas o solteras, íbamos follándonos a todos los hombres casados o solteros que pillábamos por desesperación.

No tuvo en cuenta lo mucho que follan muchas señoras casadas, con otros maridos de otras y hombres solteros sin distinción de rango ni estatus social, raza, religión y estado civil.

Con esto quiero decir, que a veces la inteligencia de las personas es mínima (en este caso mujercita) y que los celos en general , vengan de quien vengan, son falta de inteligencia.

Sepa usted señora, no sé si me lee, supongo que no, pero sirve para ofender a toda aquella que se dé por aludida, que mi chumino es muy delicaillo, que no acepta individuos vacíos, como su marido.
Que aparte de todo, las mujeres solteras y divorciadas, maduritas interesantes, solemos acceder a amantes de distintos rangos de edad, y que entre mis gustos no están los señores engominados que peinan el pelo para atrás, y que usan camisa ejecutiva y pantalones de pinza.

Con su correspondiente perfume pachuli.
Póngale usted un cartel a su marido: mantengan fuera del alcance de las solteras o divorciadas.

Na, una chuminá que se me ha ocurrido, que libremente escribo por que para eso es mi blog, y me da gana.

Dicho esto, aclarar, que él, osea, mi cruce entre perro y minino, no necesita porque siempre tiene y si no tiene, no necesita. 

No es cuestión de hambre, es más por el gusto.

¡Otra vez hablando de mi chumino!

http://lenguavivamata.blogspot.com.es/2013/04/delicaillo-que-es-mi-chocho.html





miércoles, 9 de noviembre de 2016

NA MÍO


No tengo na mío, lo sé.
Hoy he recuperado estos zapatos, estaban en Málaga. Me encantan, son calentitos y muy cómodos. Suenan mucho y me ponen el culo respingón. Pero como siempre, se los llevaron un año de mi alcance.
No me encorajo, pienso, simplemente que me los dejé en Málaga sin querer. Es que, mis cosas son mías solo hasta que mis hijos las necesitan, seguramente en este caso para una actuación, un concierto, se fueron y han vuelto un año después.
Mis zapatos fosforitos, ¡Me encantan!
Ocurre que mis hijos son como una extensión de mí, soy un pulpo, de muchos tentáculos, pidiendo, comiendo, gastando...
No sé decirles que no a nada, sería un diálogo interior absurdo. No puedo tener las cosas más básicas. No tengo tiempo para buscarlas por este infierno de casa, con sus cuatrocientos metros y sus veintiuna ventanas.
A veces me da coraje, pero la mayoría paso, a veces estallo en cólera y grito y se me ponen los ojos vueltos, y escupo palabrotas… otras veces, robo como ellos hacen, escondo y rebusco.
Sé que solo cuando me mude a vivir debajo de un puente, podré tener mis cosas a buen recaudo en mi carro robado del Pryca.
-          ¡Todo es mío! - siempre les digo - ¡todo es mío!
Se ríen.
¿De quién es la tierra?
De quien la trabaja, pues igual pasa con las cosas. Tú puedes comprar una casa, que si está llena de gente viviendo que no puedes mandar al carajo, la casa no es suya, igual que los cascos que no encuentro, que son de tres euros, pero que seguramente ahora serán de otro de mis hijos, hasta que se los cargue. No me molesto ni en buscarlos. Ya aparecerán otros.
No aparecían estos zapatos, ya heredé muchas otras cosas, que no compro ropa ni atada, que me gusta que me la pasen mis hijas y mis amigas. Me encanta como viste la gente que me rodea.
Solo mis peos son míos, me los como solica bajo mi nórdico. Si, no digas que asco, que a ti también te gusta, o es que me vas a negar que no los hueles desde pequeño bajo las mantas. Es verdad, todo el mundo ha olido sus pedos y todo el mundo se ha comido sus mocos, pero ¡qué te enseñen uno de otro pegado en un dedo, verás que asco!
Que tonterías digo a estas horas de la noche, pero es que estoy muy contenta, con todo absolutamente, y muy cansada, con tanto trabajo, que hasta para mí es mucho.
No digo nada más que chominás, no pasa nada, ya no me lee nadie, menos a estas horas.

domingo, 6 de noviembre de 2016

¡NO A LAS FEMINISTAS!

¿Qué esperáis?¿eh?
No sé muy bien como os escandaliza que digan que si la mujer se quedara en casa no tendríamos problemas de empleo, si es la verdad verdadera. Si cada mujer que está usurpando un puesto que puede ocupar un hombre, como conductora de autobús, funcionaria, policía, bombera… se quedara en casa, otro gallo nos cantaría.
Las mujeres son necesarias para ciertos puestos de trabajo, y siempre han estado ahí, cuidando de nuestros enfermos, en la familia y fuera de la casa. ¿O vais a decir que es de ahora que en los hospitales, en las guarderías y residencias de ancianos no hay mujeres? Lo que es que ahí no puede entrar un hombre, porque se lo comen.
Encima­ no puedo expresarme con libertad, en este país de ahora.
La mujer se mete donde no debe. En política, ¿qué hacen? Las podemos, perdón, ponemos ahí para cubrir el expediente, pero si no fuera porque cada cuatro años votan, se les acababa el chollo.
¡Se harían las cosas como Dios y la Patria manda!
Lo primero que hicimos mal fue lo del voto femenino, ese fue nuestro gran error.
Al principio venía bien unos ingresos extras en la familia nunca vienen mal, pero es que ya, es como un derecho que van cogiendo, que de vez en cuando hay que aclarar.  Si ellas se van a trabajar, ¿quién cuida de los niños? Otras mujeres, ¿no? ¡Y qué más da! Pagan porque otras cuiden de sus hijos, ¿No es absurdo?
Yo no sé por qué se rasgan las vestiduras, cuando es por su bienestar. Lo mismo es levantarte por la mañana y llevar a tu hijo sin prisas al colegio, tomar un café con las amigas, hacer algo de ejercicio para mantener tu bonita figura, y luego ir a comprar comidita rica para tu familia, cocinar tranquilamente mientras recoges las cuatro cosillas que salen por la casa… que levantarte a las cuatro de la mañana, porque tenías una lavadora puesta, ya que estás no te acuestas, para que te dé tiempo a hacer más cosas: despertar a los niños, meterle el bibi, ponerle el buzo para que no se enfríen, cargar uno en cada brazo, porque te da miedo subir y bajar, dejando uno arriba y otro abajo, atarlos, correr a la guarde, soltar a los niños, cambiar el coche por la moto porque por el centro no hay quien aparque, subir con el frio en la moto y llegar a las nueve de la mañana a tu trabajo.
Después de salir, comprar algo rápido para comer, llegar a casa, cocinarlo (muy malamente, porque cocinas de pena) comer e ir a recoger a los niños, para poder verlos un poquito, antes de volver corriendo con la moto porque si no no aparcas(a pesar del resfriado) al trabajo hasta las ocho.
Al salir, quedan tiendas abiertas, para comprar algo para la cena, y tus niños te esperan en casa, con muchas ganas de verte y tú a ellos y te los comes a besos, y los bañas, y los tocas, y les das muchos abrazos, y les pones todas sus cremitas y juegas con sus barriguitas y les cuentas cuentos o les pones las cintas, y después dormirlos, ya cenas tú y te acuestas.
Y que te llamen a las cuatro de la mañana, y que acuerdas que tienes una lavadora, y que ya de camino la tiendas, y que ya que te pones friegas los platos de la cena, y sigues con un café y empiezan las primeras luces del día, y así sucesivamente.
Que te escapes en la hora del desayuno y recorras toda la ciudad corriendo para ver como tus hijos se zambullen el primer día de su curso de natación en el agua, con el calor que hace en la piscina climatizada si vienes corriendo a toda pastilla. Y que una mamá de las otras, te diga que no te preocupes, que ella les echará un ojo.
Y no sigo, porque mejor me callo que ya me van a dar la del pulpo, Maria del Mar ya no me ayuda más con mi renta ni con el papeleo de la Lengua.

(tres segundos de silencio)

Bueno, un poco más.

¿Cuáles serían las políticas correctas?

Educación en los colegios, desde muy pequeños, y en las familias, y en la puñetera sociedad.
¿No hemos evolucionado con la cultura del tabaco?
Porqué en esto no.
Que a los niños se les meta el veneno dentro desde pequeños, que cuando nazca un bebé, se den tortas el padre y la madre por cuidarlo, que cuando ese bebé sea mayor no distinga entre un hombre y una mujer, porque ambos se dan tortas por pedirse los permisos necesarios para cuidarlos. Que los empresarios, que ya han sido educados en igualdad, comprendan y asuman que ha nacido un bebé en esa familia, no de esa mujer.
Que realmente seamos libres para cuidar a nuestros hijos, no que parece que se comete un delito.
Yo tengo cuatro, dos parejas de mellizos, otro día te cuento lo bien visto que está.
Que cuando nazca un bebé, que es una cosa tan chica y tan preciosa, con esa piel tan sube y tan bonica, que es supergracioso, a los niños, como a las niñas, les enseñemos que es lo más grande. Que se puede jugar con él, igual que se juega con un coche, que se puede bañar, igual que bañas a tu perro, que puedes limpiar tu casa y dejarla bonita, igual que aspiras tu coche y lo dejas impecable, que se puede disfrutar, a pesar de que son un coñazo cuando se ponen a meterte el dedito en la nariz en las siestas.
¡YO SI PUEDO ME GRABO!
No podemos exigir derechos las mujeres, si antes no pedimos el más importante. La siembra de derechos, el derecho a la educación en igualdad.
Y eso en nuestros colegios, queridas, deja mucho que desear. Y en nuestras familias, ni te cuento.  

viernes, 4 de noviembre de 2016

SIN PROPÓSITO DE ENMIENDA

Siento muchísimo ofender, de verdad que lo siento.

Siento muchísimo ofender a las personas que quiero, pero también siento, aunque menos, ofender a otras que ni conozco.

Me resulta extraño recibir el rechazo de alguien que ni me conoce, pero lo acepto. Ha sido el tributo que he pagado por escribir con libertad, por utilizar las palabras que conozco, las que he pronunciado desde niña, por no esforzarme para escribir correctamente y hacerlo fluido y libre, como me da gana.

No me he equivocado en la expresión, no es como me da la gana, es como me da gana, porque si no es así, no me da gana de escribir. Si no me mueve un sentimiento, si no me ayuda la gana, no puedo.

Cuando hace unos días me preguntaban:

-          ¿No te gustaría que te editara alguien importante?

-          Si, por supuesto, pero nunca lo hará.

Nunca me editará nadie importante, porque ofendo. Empezará a intentar reconducirme y yo intentaré ser correcta, pero automáticamente pasará una cosa, que siempre me pasa, que perderé el interés y empezaré a no tener tiempo para eso.

-          Si hombre, cuando ganes dinero, será un trabajo y lo harás.

Es posible que sí, que lo haga durante un tiempo, pero seré como un niño que dice poesías en la guardería mientras mira a la cámara y saluda a su madre, un papagayo.

Nadie me escuchará. Me comprarán, me leerán, pero no me sentirán.

Me encanta la palabra sentir cuando se utiliza de forma, se supone, incorrecta.

-          A ver si un día vamos a sentirlo tocar – dijo mi Juani el otro día.

Es más de pueblo que yo, sentirlo tocar no se dice, si quieres ser correcta, se dice escucharlo.

¿Por qué? ¿Quién estipula que la música se escucha y no se siente?

Como eso todo.

Una vez me dijeron que debían atarme de una cuerda en un descampado, echarme comida de lejos y que no me mezclara con otras personas. Me asusté muchísimo, pero ahora, pienso que seguramente será eso lo que ocurra si alguien me edita.

Me han pasado muchas cosas en estos años, he sentido el rechazo y el cariño. Han intentado pulirme, pero yo quiero ser un mineral. Que me dejen donde estoy si no les gusto, que me permitan permanecer allí tal y como soy, que no se ofendan si les digo, que no quiero ser puro y perfecto a los ojos de los expertos.

Que sigan su camino, que no me lean y así no sufren.  

Siento muchos las ofensas, pero no tengo propósito de enmienda, lo siento, sobre todo por las personas que quiero, porque nunca doy marcha atrás, cada vez estoy más lejos.

LVM

jueves, 3 de noviembre de 2016

ESPELUZNANTE






En el agua, en el suelo
En el aire, por el viento
veneno dentro.

¡Pobre alcalde exigiendo!
¿explicaciones al pueblo?
silencio y tiempo.

Todos vieron a los suyos,
despojándose de carne
olfatearon la muerte,
les esperaba  en el parque.

Pueblo que calla y no lucha
han enterrado a su gente
la tristeza los aploma
siempre el capital los vence.

Guárdate esas cosas feas
cállatelas que no saben
que ni vírgenes ni santos
de la muerte han de librarle
que aquí, de niño a anciano
no te lo asegura nadie.

Me gustaría no saberlo
enterraste ya a tu padre
era lo mejor del pueblo.

Y yo a un tío, y  a un sobrino
Y yo  a mi querida  madre
¿Y yo, que estoy esperando
a que venga a buscarme?
Y yo que cuando te lleve
tengo aquí que refugiarme,
de la lluvia y del viento
y lo que trae por el aire .

Mejor que se calle el pueblo
duerme el niño y va a asustarse
mejor que no sepa nada
mejor que no sepa nadie.

(silencio)

¿Cómo te lo cuento amor?
que temo desde el principio
que callo, pienso y  aguardo
que quieras quedarte conmigo.

Que en mi regazo te esperes
que venga a por ti, tranquilo.

En las faldas del castillo, en sus pinos.

LVM

sábado, 29 de octubre de 2016

NI ATADA


Me voy a desayunar con la Fea a La Carihuela, como en los viejos tiempos. Los viejos tiempos para nosotras se inician el 9 de junio de 2010. Aquellos maravillosos primeros días, de desayunar en el bar y tomar cañas los viernes, cosa que yo no hacía jamás.
¡Qué bien me lo estoy pasando!
No digo que no pasara mis meses de luto y fatiga, para perder 16 kilos hay que estar en depresión. No dormía nada más que dos horas, por lo que mi cerebro no se reparaba; no podía comer comida caliente, me daban arcadas, solo frutos secos y berza cruda, no sé porque, no me preguntes. Mucho chocolate, eso sí, con galletas de fibra, solo eso podía comer.
Se desordenó todo en mi vida y eso me condujo a un estado mental que despertó a la Lengua. La alimentación, el sueño, todo estaba en movimiento, una gran borrachera, que cuando pasó dio paso a la persona que soy hoy.
El tipito más o menos lo voy manteniendo, a pesar de que mi cuerpo va oxidándose y en pelota pierdo mucho,  con los años han vuelto los kilos y  ya no veo las letras, pero yo achino los ojos.
¡GAFAS NO!
Todo aquello desató a la Lengua, que hasta hoy no he podido volver a atar. He intentado quitarme de escribir, cada día escribo menos, los primeros días del blog eran, de muchas entradas, de mucho desahogarme, de mucho de todo, menos dormir y comer.
Mucha obra en casa, muchas horas en pie, todo lo que me ayudara a dormir por la noche.
Lo he cerrado muchas veces, años enteros, meses, días… pero al ver que volvéis una y otra vez a pinchar en mis enlaces, es como una droga que no puedo dejar.
Es una comunicación tan directa con tantas personas diariamente, que no puedo evitarlo.
Hoy aquí, desayunando con la Fea, me doy cuenta de que todo ha sido perfecto. Mis aventurillas infantiles del principio, mis primeros pasos en la transformación de mi casa, manejar mi dinero con mi cuenta a parte con mis gastos y mis ingresos, que me dure un poco más de lo que me duraba, llegar a fin de mes sin problema y que me sobre, comprar las cosas necesarias y las innecesarias, viajar, escribir, volver a conducir un coche…
¡UN GRAN DESPERTAR!
Imagino mi vida sola y me parece fantástica, aunque hoy estoy acompañada en el amor, muy contenta. Tengo la suerte de tener a mi lado a un niño grande que me sigue el juego. Tengo a mis hijos bien colocaos. Mi casa está preciosa, cada día es menos mi casa y más la de mis hijos.
Soy muy feliz y más que lo pienso ser.
Miro adelante y veo, muchos años de aventuras, muchos cavos atados y otros nuevos por atar. Total, tengo tiempo hasta que me sobrevenga la muerte por sorpresa, como siempre.

jueves, 27 de octubre de 2016

MIS OBSESIONES FAVORITAS


Es verdad que soy muy obsesiva, otra vez me he despertado soñando con mi granja. Otra vez he terminado despierta la cubierta de la nave espacial. Otra vez he hecho de madera buena y bien tratada mi barco(en el pueblo de mi chico las venden, cada vez que me lo dice, una voz en of producto de mi obsesión me lo recuerda, para tu barco), otra vez he quitado el kiosco y he puesto un comedor de madera al descubierto, otra vez las cocinas, otra vez las gallinas, otra vez la huerta, el jardín de esencias para hacer perfumes, la torre vigía con las ruedas gigantes de la que sale un tirolina o un puente mono, el coche volador, las latas puestecicas para apedrearlas, el pinchiqui, el horno de leña, los niños haciendo pan con tizones, otros bajando de la montaña con Eduardo que se los va a llevar de rutas, que conoce toda la zona como la palma de su mano…

Esta vez veo a Adela manejando el cotarro, es posible que me haya muerto ya, de vieja. Ya ha superado la E.S.O., el bachiller con su buena beca y está terminando lo que ella quiere hacer, psicología infantil.

Colabora con muchas asociaciones de ayuda para niños especiales como voluntaria. Que digo yo, que estos niños especiales, en realidad son mejores que nosotros, porque son niños toda la vida y por lo poco que los conozco, su genialidad los ha llevado a ser diferentes. No digo que no sea difícil la convivencia con ellos, no digo que no sea más cansado, pero los pocos que he conocido están en mi corazón con mucha más fuerza que los otros, los que no me necesitan.

En fin, que es cierto, que hasta que no termine mi dormitorreo, no voy a descansar tranquila, que hasta que no cumpla todos mis sueños, viva o muerta, no voy a descansar. Pero digo yo, que ser obsesiva no está mal, si tu vida continua como las demás y tienes como añadido este problema. Si vas al trabajo, si compras, si limpias… ayer dejé la casa como una patena. No se puede mirar al techo que se notan los resfregones, pero ya está pintada al completo.

Ahora tengo que hacer lo mismo con la cochera, terminar mi dormitorreo y todas las cosas repreciozas que quiero hacer ahí abajo, para cuando vengan las personas a visitarme, poder recibirlas como a mí me gusta, que estén como en su casa.

Y digo yo, que si hago como le dije a mi hermano ayer, mato a la cerda y nos la comemos, todo esto, dejará de ser una obsesión. Abandono la tierra, que de todas formas me engañaron con ella bien engañá, que se puede ser tonta, pero gilipollas no. Pues yo, las dos cosas.  Dice mi hermano:

-          Una cosa es la confianza en tu pareja y otra la ingenuidad. La última forma parte del sistema operativo de cada una, la primera se programa y como tal, se puede desinstalar.

No me gusta la informática, pediré que me la desinstalen y me formateen completa, a ver si se me pasan las obsesiones, o sueños o como lo queráis llamar.


martes, 25 de octubre de 2016

LO ASUMO


Comprendo que la gente piense que estoy como una cabra. Comprendo que le den la razón a todo aquel que hable mal de mí. Bueno, mal según quien valore, hablar mal sería decir que soy mala, no creo que mucha gente diga que soy mala, solo uno claro, al que nadie hace caso por mentiroso, su culpa es, que todo el que lo conoce hace oídos sordos.

El caso es que mala no soy, pero sí difícil de llevar. Una muchacha que ha criado una cerda en un tercereo sin ascensor, que todo el mundo decían que no era de las pequeñas y no hacía caso.

Menos mal que vino el veterinario del pueblo a sedarla, si no a ver como la bajamos, eternamente agradecida.

Lo comprendo, lo entiendo y asumo. ¿Quién va a ser el valiente que salga conmigo en la foto? Por eso, ya de entrada, me niego, me niego a salir antes de que se nieguen.

Ya me ha pasado varias veces, no una, que hay personas que se esconden, luego aparece otra persona más llevadera y todo lo que dijeron que no hacían por convicción, de pronto era, por…

Por decirte algo. No te van a decir: no salgo contigo porque se van a reír de mí, me van a preguntar que tal lo haces, van a sentir “envidia cochina” porque estoy por tus huesos, si es verdad que todo lo que escribes lo haces en la cama...

A veces paso envidia cuando veo a alguien de la mano de otro, y no soy yo, y resulta que el otro antes no me quiso dar la mano.

Pero lo asumo, sé perfectamente con quién se la están jugando.

¡Hay que ser muy valiente!

No soy una más del montón, lo sé, soy una más del rincón.
LVM

lunes, 24 de octubre de 2016

INMORTAL


Repasando las fotos de mis hijos, me doy cuenta de que son mis verdaderos tesoros. Está muy visto decir esto, lo sé, pero es que ellos me hacen inmortal.
He tenido mucho trabajo, mucho, una locura, pero ahora que dos se han ido a estudiar y los otros cada día están más mayores, me doy cuenta de que me lo he pasado en grande y volvería a hacer exactamente lo mismo cada día de mi vida de los que he pasado con ellos.
He exprimido cada instante.

Cada uno de mis hijos nació así, no los he podido educar, entre otras cosas porque a todo les digo que sí. Le prometí un día en la mesa a mi hijo, que él sería lo que quisiera. Alguien le dijo que sería imposible que estudiara nada, porque tenía muchos hermanos. Se le saltaron las lágrimas y todo. Lo miré y le dije:

-          No escuches a los tontos, que no saben, ¿confías en mí? Lo que tú quieras, porque yo estoy aquí.

Estoy estudiando Mobiliario en Granada con él, mi gran sueño, ¡rodeada de tíos y de herramientas! No sé que será de mi vida, pero mínimo que la alargo por aquí unos cuantos de años y si tiene hijos otros pocos más.  

Estoy tocando un instrumento, la verdad, ese sueño es más de mi hija, pero yo lo vivo, me imagino en Málaga viviendo lo suyo y ya mismo en Barcelona, si no torpeo mucho.

Ahora que creo que puedo, voy a estudiar duro para ir a la universidad. Que me vean todos los compañeros que se rieron de mí, que pasen envidia de mi pelo, que hablen con mi mano que yo de ellos paso y sobre todo, que se coman una JA y una MI.

Y por último, el más pequeño. Yo siempre le digo que fue el hijo no deseado, porque yo quería uno suelto y vino el último, así que es el error. Desde pequeño diciéndole que es bizco para que asuma ese defecto y ahora,  que ya con las gafas está corregido, es simplemente perfecto.

No sé que será de él, es completamente impredecible. No sé si estudiará o falsificará su curriculum, no sé si como dice él será mi hombre toda la vida y tendré que soportarlo por inútil, o si finalmente como tengo metido en la cabeza será alguien muy importante para muchas personas en esta ciudad.

Cuando digo importante, nunca hablo de dinero.
LVM

sábado, 22 de octubre de 2016

SENTIMIENTO JAENERO



¿Alguien en esta ciudad, 

que esté dispuesto quemarla, 

del castillo al bulevar?



¿Hay alguien?


(SILENCIO)


¿Alguien que quiera esfumarse?

¿Alguien que aspire a emigrar?

alguien que cuando se largue, 

ni vuelva por Navidad.


¿Hay alguien?


Alguien que tenga cojones 

de tener cojones de hablar

alguien que vea precioso

mi reflejo en un cristal.


(SILENCIO)


¿Hay alguien?


(SILENCIO)


¿Hay alguien que quiera follarme de forma salvaje en esta ciudad?

¿Hay alguien?



(SILENCIO LARGO)


¿Alguien aquí vive feliz? 


¿Come, folla y puede dormir?


¿Hay alguien?


(SILENCIO)


¿Alguien aquí que la admire?

Que necesite su cruz

que se aburra con mi pelo

¿No tienes dignidad, tú?


(SILENCIO)


¿Por qué esta tierra quema, y las otras llaman?


¿Por qué se van los míos? duele el alma.


¿Quién se queda, quién se queda? 


¡En esta ciudad de mierda!


LVM 

25 SEP 2016