sábado, 31 de octubre de 2015

¿UN NOVIO?

¡Qué aventura hoy, cuantos cabos sueltos he atado!

He ido a por leche para mi Vacarris BB, luego he ido a un almacén de materiales de construcción a por un saco de yeso que casi no me cabe con el montón de comida que llevaba para la Vacarris XXL. 

He tirado para un pueblo cercano a mi barco, que hay buenos materiales, más baratos y además la dependienta es una mujer y muy simpática, se parte de risa conmigo.

Ya me ha dicho que me va a subir hierros sin cobrarme el porte porque van a llevar materiales a un vecino de mi tierra.

A mitad de camino, me acuerdo de que llevo varios días con la moto en reserva y con la raya bajo el último palote rojo, al menos dos. Ha sido a cara o cruz, pero he llegado a la gasolinera, que subidón de adrenalina, yo pensaba que me quedaba en mitad de la carretera.

Luego he cargado hierros de forjado para mi muro. En mi moto claro, casi seis mil kilómetros tiene ya. Don Quijote parecía. Se notaba el peso de ese lado, la próxima vez me pongo dos lanzas.  
Si me multan, ya tengo asumido que el gasto es más pequeño que tener coche.

Necesito ruedas, voy a tener que coger el coche de mi madre. Me caben diez o doce.

Total, el yeso: uno cuarenta, la leche: ocho euros, los hierros: trece… esta es la inversión de hoy en mi granja.

Al llegar al campo no encontraba mi excavadora de mano, ¿Por qué? porque mi mente llevaba varios días diciéndome que tengo que organizar las herramientas, tirar basura y perder el tiempo en cosas que no son construir. ¿Qué ha pasado una vez que he dejado todo organizado y limpio como la patena? Que he encontrado la excavadora de mano. Y así, a currar mucho, pero con mucha ilusión. Ya me gustaría a mí tener más tiempo.

Echo de menos tener una pareja así, formal, pero no hay más tiempo. Puedo sacar un ratico un día para invertirlo con un amante. Nos queremos pero solo a veces. Es divertido, pero escasa la presencia.

Con lo bien que me lo he pasado yo sola, haciendo y deshaciendo a mi antojo, si tienes otros compromisos, no puedes con todo. 

Mi niña se va a Almería a las cinco. Han sido solo veinticinco horas. En estas, la llevé al médico nada más llegar, luego al ensayo, cenamos, dormimos junticas, han ido las niñas juntas a pasear a Vacarris BB por el parque mientras yo hacía cosas en el campo, hemos comido con la abuela Rafaela… ¿qué más se puede pedir?

Un novio.


¿Cuándo?¿Cómo?¿Dónde?

Mejor unas cañas y voy que ardo, nunca mejor dicho.

LVM

martes, 27 de octubre de 2015

Del tirón y sin cortes, retransmitiendo, YO

Mi cuarto no tiene nada. Son maderas viejas, no tiene ni puertas mi armario. Una tela en la pared, ni cama tengo, solo un colchón con patas, aunque la verdad bueno es.

Una canasta, un armario partido en dos para que parezcan una estantería, coloreada con pintura de pared, llena de lanas, libros infantiles y peluches. Una mesa que alguien iba a tirar y otro canasto rosa… ¡ah! Y una papelera de un demonio rojo, que también iban a tirar. No tiene ni puerta mi cuarto, directamente veo la tele desde aquí.

¿Qué pasa con mi cuarto que a todo el mundo le gusta?

Siempre hay alguien en mi cama, siempre tengo que echar a todo el mundo de la cama de la reina, que pestiñazo de vida.

Cuando empecé mi primer espacio, todos allí querían vivir, después el segundo espacio, luego otro y así hasta hoy. De todos los sitios me echan. Hasta que no vivo en ellos, a nadie les gusta. 

Me voy moviendo huyendo de unos y de otros y me persiguen. 

Todos, hasta los gatos.

Muero sin morir en mí.

Aquí se viene a leer, a estudiar, aquí se ven los mejores vídeos de Internet. Aquí estudiamos música, aquí es donde se dan los mejores sermones, este es mi púlpito.

Solo hay un momento del día en el que tengo derecho a gritar:

¡Largaros de aquí de una puñetera vez!

Este, es el momento. Ahora. Ya cenaron, ya fregué los platos, estoy experimentando con los palitos y los puntitos que vienen puestos en las cinco líneas de los pentagramas que estoy empezando a descifrar. 

Estoy escribiendo para vosotros, tengo un libro a la mitad de leer, de escribir tengo varios, waseo con una amiga… mi cama es mi mesa de operaciones. Es como un mapa de esos de hacer guerras, todos mis soldados aquí, estudiando el terreno. 

Ya saqué el pan de los bocadillos, ya corté le jamón para mañana, aquí estoy por fin, sola. Ya he abierto al gato, ya tengo mi pijama de coralina y es ahora cuando se escucha una voz en lontananza que dice:

-          Mamá, ¿me haces una lechita?

PENSAMIENTO: ¿aún podré renunciar a su custodia?

Sueño con el día que pueda abandonarlos, vive Dios si miento si no es cierto, ese día, llegará algún día y vosotros lo disfrutaréis conmigo, porque vosotros también lo estáis deseando.

LVM


domingo, 25 de octubre de 2015

UN DESASTRE



Hace tiempo que no escribo, mis motivos tengo: empecé a estudiar música con maestro, se me pasa el tiempo volando,este año además estudiaré teatro, estoy haciendo una manta de croché y unos patucos, ahora veo un poco la tele, sobre todo películas... 

Tú pensarás:

-          Yo no sé para qué quieres aprender tantas cosas, si al final vas y te mueres.

-  ¿Han cambiado la hora? 

Efectivamente, el reloj de mi cocina pasa de las nueve y media, o sea que aún no son ni las nueve.

Bueno, pues escribo y os pongo al día. 


Mi vida es un puzle desastroso pero están todas las piezas y si falta alguna, como no lo he terminado de montar, no lo sé.

Tengo un montón de hijos repartidos, vivimos en distintas ciudades, pero tenemos el wasap funcionando veinticuatro horas al día, que te lo digo yo a ti.

Mis animales y amigos también están dispersos por toda la geografía española, pero yo voy a verlos con mi moto. Sigo sin tener coche, pero dentro de un par de años voy a apañarme uno para subir a Asturias, en la mi moto, una escuter de mierda, sería un poco... ¿ridículo?

Hoy se ha meado Gatochico y lo aguanto. Tengo una cerdita dando saltos tirando del edredón.

Nos vamos a ir al campo, pero ahora me tomo mi tiempo. Ya no tengo desasosiego. Sé que la cosa que estoy haciendo allí arriba, o se hace con calma o con mucho dinero. 

Mucho dinero no tengo y yo marranadas no hago. Así que estoy escribiendo un poco, tranquilamente, antes de subir a pasar el día allí con mis bichos y mi excavadora de mano. 

Me encanta trabajar allí arriba. Sé que podrían ayudarme, pero no quiero. Yo sola. Es mío. Mi tesoro.

Estoy leyendo un libro y me gusta. Muchas coincidencias, por eso me lo recomendarían. Hasta hermano secreto tiene. 

La verdad es que los libros serán allí arriba una buena opción para pasar el tiempo. Pero no puedo dejar que entre cualquier libro en mi barco, tengo que leerlos antes. La caca, a la chimenea. 

Dirás que bruta, tirar un libro a la chimenea. Un libro para mí, no tiene ningún valor si solo balbucea letras aburridas sin sentido. El que quiera que queme el mío. 

Tengo que revisarme la vista, ya no veo. Nela me dejo sus gafas y aunque me resisto, al final, tendré que ponérmelas. 

Tengo una cara de pan que no aguanto con ella, cada día estoy más gorda. Es la paz. 

Esta cara con gafas, ya para matarla.

Estoy haciendo una colección de películas que me gustan, porque me las recomiendo un amigo sabio. Sabio porque que sabe lo que me gusta, en todos los sentidos.


Al final tengo de todo, pero no revuelto. Mi hombre vive en otra casa y solo compartimos cama y comida en ocasiones. Esto evita la vulgaridad, hay otros momentos para tirarse los peos. Nos contamos las cosas pero dándonos besos y comiéndonos el cuerpo, no hay tiempo para perderlo. 

No especifico las partes del cuerpo que si no queda muy vulgar.

Un desastre de vida tengo, para nada una familia tipo, pero aquí todo el mundo se esfuerza en aprovechar hasta el último segundo, por si mañana esto ha reventado. 

LVM

domingo, 11 de octubre de 2015

EL CAMBIO

Está lloviendo. Todo el día lloviendo para que no pueda ir al campo. Todos están en la feria, pero yo me reservo para la semana que viene. No se puede estar tantos días de feria, mucha pasta, mucho desgaste físico, mucha malura.

Aquí estoy, en mi fin de semana del cambio. ¡Qué a gusto!

Ya llevaba tiempo bien, deseando que empiece el curso, como cuando era niña sin echar de menos nada. Cumpliendo ciclos de vida simplemente. Deseando empezar la actividad, que llegue el frío y la lluvia, quemar chimenea, sembrar las habas... 

Este año voy a hacer teatro y si se puede, estudiar música. 

Está bien fijar una fecha en el calendario, el día del cambio. 

Pongamos que empezó este fin de semana, el viernes nueve de octubre, el cumpleaños de mi Nela. 

Ya venía de lejos, se estaba preparando, pero no había terminado la casa y no podía parar de ser como era antes del cambio. 

Espero que sea duradero, aunque no definitivo, tengo que cambiar muchas veces más antes de morir. 

Otra de las cosas de mi cambio, es que ahora me la suda quedar bien. No pienso relacionarme con personas que no me aportan y no me caen bien. No pienso ni contarlo. No pienso ni dar explicaciones, simplemente, me quito de en medio sin temor a quedarme sola. Al contrario, siempre habrá otras personas que se quitaron de en medio, por tener yo tan ingrata compañía. 

¡Joder como hablo coño! es que ayer fui al teatro y hablaban en castellano antiguo, todo se contagia. 

Ayer volví a leer periódicos y lo peor, me intriga leerlo de nuevo hoy. Incluso, me gustaría conocer noticias de nuestros políticos y su carrera electoral. Me preocupa tanto cambio en mí.

Estoy leyendo un libro sin aburrirme y sin necesidad de esfuerzo.

El título me lo recomendó mi amigo Juanito Calentura, sabía lo que hacía el cabrón. Es una mujer muy parecida a mí la que habla por escrito. 

Me lo compré hace meses, pero no había terminado la casa y no había llegado el momento o la persona que me hiciera abrirme.

Estoy leyendo en voz alta. Me escucho y me entiendo, es más, creo que hasta leo bien. He llorado, me he reído, he sentido pena por la muchacha, porque está gordita y no se come un roscón.

La verdad, no puedo sentirme identificada con esta parte, aunque después de este fin de semana de inactividad y descanso, a lo mejor me echo encima un par de kilos.

Lo de que no se come un roscón, pues lo siento por ella, pero parecerme en eso es más difícil, y no porque yo busque, no estoy en ningún sitio de esos de buscar pareja, en el face me puse comprometida, pero es que la mejor manera de ligar, es no buscar, ir a tu aire por la vida, hacer muchas cosas, interactuar con muchas personas y responder a estímulos mínimamente.  

Mi vacarris bebé, ha vuelto a hacer caca normal. Me preocupaba lo suelta que estaba ayer. Supongo que pensaréis, que tía más tonta, con los animales. La verdad, me da exactamente igual lo que penséis. 

Es tan tonto cuidar a un lechón, como hacerlo con un humano y he criado cuatro. Al final te dan lo mismo. Experiencias, alegrías, penas, cariño, compañía…

Si, si, si, si, ahora vendrán todas las madres abnegadas y buenas a decir que como puedo comparar un hijo con un cerdo. No conocéis a mi hijo mayor, en cuyo caso, comprenderíais que la comparación es odiosa, para el cerdo claro, ensucia la mitad y gruñe menos.

Pues aquí tengo a la vacarris bebé liada en un trapo. Más contenta que la mar porque ha comido, dándome empujones con su naricilla, mullendo para dormirse a mi lado.

Si, si, un cerdo, a veces duermo con un cerdo, con mis gatos y hasta un pollo de aquellos de colores... 

Aunque lo dormí mucho.

LVM


sábado, 10 de octubre de 2015

TÚ ERES NORMAL

Llevas razón, eres una persona normal. 

No eres un releído ni un cerebrito. Eres simplemente, normal. 

Soy yo la que debo tomar nota, y no por mí, por mi hija pequeña. Debo predicar con el ejemplo y hacerle ver que ser disléxica no es una carencia de por vida. La mayor ya salió hace tiempo, pero la peque me admira mucho como para ver que si yo no leo, si yo no cultivo mi cabecita ella tampoco deberá hacerlo.

No es cierto, el mundo está lleno de personas normales, que verán esa carencia en ella. Ella se defenderá como yo lo hacía, llamándoles redichos y resabidillos, pero no es el camino.

Estamos a tiempo.

No importa que no recuerde nombres o que no dé con las palabras necesarias para expresar cosas que tengo dentro de mi cabeza, yo lo sé y punto,  la verdad, me la trae al pailu lo que piensen los demás.

A estas alturas de mi vida, no tengo nada que demostrar.

Nuestras habilidades son muchas, algunas destacables, pero no podrán suplir las de las personas normales.

Ya terminé mi casa, ahora sí. No se le puede sacar más partido, ya no le hago nada más.  No olvidaré mi proyecto de construir una granja, no puedo, tengo una cerda en mi baño. Además, estoy convencida que en el futuro me ayudará económicamente a mantener estas cuatro bocas que eché al mundo, pero voy a dosificar mi tiempo.

Voy a dedicar un poco de mi vida a cada cosa, en su justa medida.

Empezaré por este artículo, lo leeremos juntas mi niña y yo. Le pondré música también de este señor. Sabe lo que dice en sus letras, les puede gustar más o menos, pero es un buen letrista, yo se reconocer eso, es una de mis habilidades. 

Esto es lo que nos ocurre a las personas con dislexia, por si alguno no lo es y no lo entiende. No leemos poco a poco, visualizamos de golpe. La imagen general de estas letras, que no dejan de ser lineas negras que forman dibujos, me emitió el siguiente mensaje:

EL CARA DURA DEL LÍDER DE JARABE DE PALO: ESTOY TRISTE PORQUE TENGO CÁNCER.

Pensé, que cabrón, se ríe de la gente con cáncer. También es cierto que en mi recuerdo, están muchos artistas como Bebe, por ejemplo, que hacen el gilipollas en sus declaraciones, creyéndose por encima de todos, y del dolor de una persona que está sufriendo, en este caso por esta enfermedad. 

Todo eso en mi cabeza en un segundo, pero al terminar el mensaje me di cuenta de que algo no encajaba, me paré, y esta vez leí. 

LA DURA CARTA DEL LÍDER DE JARABE DE PALO: "ESTOY TRISTE PORQUE TENGO CÁNCER" 
http://www.ciudad.com.ar/cuento-algo/dura-carta-lider-jarabe-palo-estoy-triste-porque-tengo-cancer_66187

LVM

miércoles, 7 de octubre de 2015

POR ALGO SERÁ

-          Lo siento, mira, pero no. Y te voy a decir porqué …

Silencio
Recopilación de datos
Valoración
Toma de decisiones
Silencio

….


Tres segundos después…


-          Porque no.

Hace tiempo que no discuto, simplemente actúo. Hay personas que necesitan hacerlo para seguir viviendo, las ves venir a una legua. Yo ya no les doy matarile, que es lo que les gusta. 

Antes, cuando era más joven, entraba al trapo, me defendía, intentaba hacerme con la razón.

Llámame omnipotente si quieres, pero ya sé lo que tengo que hacer desde el segundo cero. 

No discuto, actúo, aunque sea erróneamente.

De las decisiones erróneas también se puede sacar provecho. Lo asumo cuando pierdo, como una pérdida necesaria mucho más pequeña que la pérdida de tiempo de discutir. 

Las gallinas que entran por las que salen, acciones acertadas y erróneas componen mi forma de vida.

Tengo un ritmo de vida más rápido de lo normal, por eso, al final, el balance será siempre positivo. Por muchas gallinas que salgan...

Mis años, mi experiencia y mi curriculum, me permiten decir eso de:

-          No, por qué no.

Y siempre habrá alguien que pensará:


-          Si ella lo dice, por algo será. 

martes, 6 de octubre de 2015

FLUYO

Hoy bajé a mi barrio a comprar. A mi barrio de toda la vida. Siempre que lo hago me asaltan los recuerdos, se me tiran a la moto mientras lo cruzo.

Miro atrás todo este tiempo transcurrido. Día a día los recuerdo todos. Es curioso como en la moto pienso mucho. 

El casco me ayuda a guardar mis sentimientos. Hasta lloro si tengo ganas, nadie me ve. He llorado mucho en mi moto, he purgado amores grandes estos últimos años. Poco a poco se va perdiendo la nostalgia. La primera vez que pasé por mi barrio con mi moto después de muchos años, sentía mucha morriña, como cuando pasaba por lugares que habían sido testigos de mi amor.

Ahora ya no, ya estoy curada y tranquila. Fluyo muy bien.

Hoy vi mi vida en varias etapas. La infancia, el enamoramiento, la crianza de mis hijos… y ya prácticamente no tengo recuerdos hasta mi divorcio.

Explosión de experiencias. Todas me hicieron madurar. Sigo siendo una mujer de contrastes bruscos, en lo referente a sentimientos. Necesito muchos mimos, máxima atención. Necesito sentir que me ansían, que me lo recuerden a cada momento, si no, me distraigo. Me enfrío. Me despisto. Me olvido.

Ya no malpienso tanto. Todo me viene bien. Que salgo de viaje, que bueno, que no voy, mejor.

Que me buscan, me encuentran. Que no me busca nadie, me muevo con más libertad sin miedo a ser encontrada.

Ya no tengo la misma fortaleza, los años pasan para todos y con ellos los accidentes de moto. Cuando me fallan las fuerzas pienso: 

- Otros tienen menos que yo. 

Estoy vieja pero petá gracias a mi excavadora de mano.

Ya no me divierte trasnochar hasta el amanecer, bueno, eso no me divirtió nunca.

Me gusta planificar la improvisación. Creo que el viernes tendré una cena interesante, quizás el sábado esté en el teatro, a lo mejor el domingo duermo en el campo. El lunes no trabajo, eso seguro.


Lo tengo todo controlado, si no es esto, pues será lo otro. 

sábado, 3 de octubre de 2015

MI PASIÓN

Para mí no es trabajo. Cuando la gente me dice:

-          Nena, siempre estás trabajando.

No sé que decirles, incluso suelo justificarme. Pero es que para mí no es trabajo.

Pasar horas detrás de una cerda engañándola con el paté para cortarle unas uñas, caminar por mitad del monte con mi casco y mi chupa de la moto, llorando porque se me ha escapado, construir una casa ojo para ella, quitar la mierda, cortar los árboles, quitar las hiervas…

Es mi pasión. No es trabajo para mí.

Es como para mi Nela, montar en moto; como dibujar para Ángel; Hacer vestiditos a las barriguitas para Emma…

¿Y la escalada? ¿Puede haber una cosa más tonta que eso?  Un tío que se pone a subir por una montaña, cuando está arriba dice:

AZUMBAUEEEEE!!! -  y se baja.

O la bicicleta, habiendo motos y coches.

No es absurdo, es una pasión.

Construir para mí, es una pasión, que ojalá pudiera ser algún día mi medio de sustento.

El roce con los animales, me tranquiliza, respirar aire allí arriba en mi barco, lo siento, pero no es lo mismo que hacerlo aquí abajo. Comer de una huerta cosas con sabores. Cocinar en un horno de leña… calentarte los pies con tu gato, como ahora mismo con mi gato Blum. ¡Qué paciencia tiene el pobre!

Cucha que bonica es mi Bebé, aquí la tengo a mi lado, panzarriba con sus pezuñicas dándome en la pierna… Tengo que ir pensando en cortarle las uñas ahora que puedo.

Yo he ido con mis hijos a pasar un día en el campo y hemos hecho una peazo de cabaña con palos y troncos, impresionante. Por la noche, para la casa todos.

Soy ambiciosa, lo quiero todo y todo lo consigo, pero además, es que es mi pasión. ¿Lo he dicho? ¿Cuántas veces he repetido esta palabra? Pasión. No pienso buscar sinónimos.

Siento mucho decir que construir, puede parecer una pérdida de tiempo, pero al final, las cosas quedan echas y dan sus frutos.

El otro día, registré un libro de poesías, eso para mí, también es construir. Ahí queda sembrao, como el resto de las cosas.

¿Que no sirve de nada? 

Pues claro, como subir a lo alto de un árbol. 

LVM