VERRACOS

Pero ¿Cómo puedes estar así si solo han pasado tres o cuatro días?

Es que no puede ser. Que no puede uno estar payocura perdío, desganaico totalmente y que con escuchar un poco la voz del otro ya nos pongamos verracos verracos.

Encendíos.

Solo con un simple wasap ya se palpan las ganas en cada letra. Nunca lo sentí tan intenso, tan de verdad, tan evidente, tan exagerao el deseo que nos tenemos.

Pronto volveremos a vernos y a saludarnos como a nosotros nos gusta.

Al final nos vamos a acostumbrar.

¿Qué pasa? Que todo el mundo con el tiempo se aplaca un poco, pero como para nosotros cada día que nos vemos es el último, no hay nada previsto, nada escrito, esta no se vale y así todas las semanas igual, ingeniando mil fechorías para la próxima.

¿Por qué no nos casamos? ¡Qué termine esto ya! ¡xD!

Esto es un sinvivir. Un toma y daca insoportable.

Venga triplex, venga otro triplex, un diez por uno...

Que te he dicho que ya no se puede superar,  pero es que eres muy cansino, mucansino. Siempre buscando que yo me rinda. Es que no te enteras o no te quieres enterar, que nunca me canso, que soy de resistencia nuclear.

¡Es qué! ¡Es qué! ¡lo que hay que aguantar!

Trabajo en la construcción y para resistir más cuando estoy cansada, allí hago los esfuerzos por repeticiones como en el gimnasio.

Diez repeticiones de bajar petacas, otras diez repeticiones de echar palas de arena, otras diez… y así sucesivamente.

Y tú, venga a intentar superar la marca. A ver si me rindo.

¡Qué no, que no se puede!

Que desasosiego general durante toda la semana pensando en el fin de semana. 

Obsesionaicos con lo mismo. 

No digo que no tenga yo mi morbo, que sí, que supongo que lo tengo. A pesar de los años que llevo acumulados, tengo todos mis dientes y todo mi pelo.

La lengua que anda suelta, tiene su público.

También es verdad que ante mi presencia, otros se hacen los payocuras y tú si pudieras me sacabas del trabajo para llevarme a palmetazo limpio hasta tu cama.

Y sin cama.

Te pongo tanto que te animas tú y ella solo con imaginar el olor de mi sobaco ¿A qué si?¿A qué si?¿si?

¿A que te pone mucho que diga a que sí?¿eh? 

¿A que te pone mucho que diga eh? ¿eh?

Me pones tanto que mejor ni te pienso, porque si te imagino follándome, me pones, pero si te recuerdo en tus conversaciones, con la cara de sinvergüenza que tienes, con las segundas que siempre llevas, tus tonterías, tu sonrisa, tus insinuaciones... 

Aunque solo digas buenos días, ¿Cómo lo dices? ¿Eh? Lo dices para que me ponga verraca.

Esto es como el niño porculero del colegio, al final no dice ni pio el muchacho, habla otro y lo castigan al rincón. 

Yo se que te pongo tanto, que solo piensas en mí,  coño. Que no escuchas a nadie cuando te hablan si te hablo, que estás todo el tiempo como el que se está meando en mitad del teatro, con cara de lastimica y las lágrimas saltás. Así te imagino  esperando a que termine la semana solo para venir a verme.

Te follaba en mitad de la calle para que la gente pensara que es un performer. Tú ahí, disimulando y diciendo:

-          Señora, ¡a ver esta mujer que me está haciendo!

Puro teatro.

¿Qué si nos queremos? Yo que sé, eso que lo juzgue el tiempo. 

La verdad verdadera, es que es muy divertido, mi vida es mucho más alegre si estás a mi lado.