sábado, 11 de noviembre de 2017

RENEGADOS

Renegaos aquí ni uno.

Ya se lo he dicho a mis hijos, no quiero a ninguno a mi lado si es un renegado.

El que duerma bajo mi techo que me adore como mi el gato Mori que no me deja ni escribir, ni coser, ni moverme por las noches, ¿no sería una traición que aceptaras mi techo y luego renegaras de él? 

Pues si vives en Jaén seas nacido o acogido, no la enmierdes, si no te gusta a buscarse la vida por ahí, a tomar por culo todos los renegados.

¡Coño! que comen de nuestra mano y que cobran a final de mes y despotrican de nuestra ciudad por las esquinas de Andalucía. Estoy por poner en las entrevistas de trabajo la pregunta de si le gusta vivir aquí y si dice que no, que aquí no hay na, que Jaén es una mierda, a tomar viento del bueno de tu casa.

¡Joder! que nuestros hijos tienen que aguantar a muchos profesionales renegaos y cobran lo mismo que los otros. Técnicos más listos que ningún jaenero, directores de departamentos que traen para que hagan méritos porque nadie quiere venir  y luego se largan y no hablemos de los políticos. En todos los trabajos  vienen listos que nos miran como a pueblerinos. Pues sí, se nos nota en la mirada que somos de aquí y a mucha honra, 

¡Jaén es un pueblo grande y qué! A mí me gusta.

Como dice el chiste del chiquillo que le gusta el amoniaco:

-          Pues a mí me gusta.   

¿Dónde piensa uno un sábado por la noche que quiere una cerveza y sin decir nada a nadie, en cualquier esquina te paran  para que te bajes de la moto y te eches una? ¿Dónde?

Lo de la moto me ha pasado ahora mismo que me ha pillado mi Curro por banda, pero es verdad que ahora paso en la moto el doble del tiempo que antes .... ¿Por qué? 

¡OTRO DÍA OS HABLO DEL SCALEXTRIS! El otro día pasé miedo en la moto, no sabía si iba a poder volver a casa. Entre el frío y el tiempo que pasé perdida por mi propia ciudad me acordaba de la película de dos tontos muy tontos. Una vez que cogí la vía en una dirección, me empezó a llevar de un lado para otro como si fuera una colchoneta inflable que lleva la marea. Pasé miedo de verdad, pensé:

-          ¿Y si se me acaba la gasolina, qué va a ser de mí? No sé cómo llegar hasta la gasolinera sin agotar antes el depósito dando vueltas.

Bueno, como iba diciendo, ¿dónde te paran con la moto y recibes en ese momento  un wasapp de otro grupo que está por el barrio y te divide el corazón en dos aunque al final te quedes en casa porque estás reventa y porque viene el más cansino de todos mis hijos a ver una peli con palomitas¿ ¿Dónde? ¿Eso cuánto vale?

¡Qué noooooo! qué estamos muy equivocados! qué nos han metido esa mierda en la cabeza! qué tenemos que cambiar el eslogan de que en Jaén no hay na por el de: 

¡CÓMO JAÉN NO HAY NA, ni poyas!


Lo dice, una que fue a nacer en Cataluña. 

Nota: me ha llegado otro wasapp, están a pocos metros, no puedo resistirme, me bajo a la calle aunque sea en pijama. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario