domingo, 29 de marzo de 2020

LOS ERRORES

No existen.

Puedes pensar que fue un error casarte con esta persona porque no te fue bien, pero seguro que no te hubiera ido bien con ninguna otra. Fue tu pareja durante años te llevó a conocer a otras personas, a vivir momentos felices, a tener a tus hijos tal y como son hoy. Asume que todo fue un acierto y continua viviendo.

Hoy desperté pensando en mi padre, se equivocaba cuando decía que el vecino inundaba su casa porque tenía la piscina rota. Terminaron en el juzgado y sin embargo, solo observando la zona donde estaba situada mi casa y con el paso del tiempo, se dio cuenta de que el agua venía del subsuelo. No fue un error, todo es aprendizaje. Después de él muchos tuvieron que hacer lo mismo para que sus sótanos no se llenaran de agua.

De nada sirve lamentar, es de nenazas, solo aprender de los hechos, que nunca serán errores como dice la frase hecha: de los errores se aprende, por si alguno aún no ha conseguido llegar a entenderme.

Para mí la vida es como un libro abierto, lo leo o no lo leo, casi todos me aburren. Dispongo de la información pero solo la voy utilizando según la necesito. Todo lo que hago lo hago por instinto y según los hechos que voy conociendo. Siempre, siempre sé absolutamente lo que tengo que hacer, cual será el siguiente paso. A veces necesito dormir la idea un par de días, pero he perdido poco el tiempo.

Tengo claro que todo terminará con la palabra FIN y nada más y que tras de mí los hechos que realicé durante mi vida se seguirán modificando.

Hay hechos que inevitablemente se deben a mi acción y la de mis compinches. Mis hijos son hoy artistas porque yo salí corriendo del trabajo el día que cumplía el plazo. Son artistas sobre todo porque así me lo pidieron, si no, tampoco hubiera sido posible. Todos nuestros actos van acompañados de los actos de el resto del mundo que te rodea y el conjunto es la vida.

De nada sirve que te empeñes en dirigir, no tienes autoridad en el universo.





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