Si el hueco que deja es muy grande, no importa lo larga o
corta que fuera nuestra relación, si las pérdidas en la vida que continua hoy
son grandes; esa persona te compensó.
No importa lo que te hiciera, si fuiste feliz o no,
simplemente era un elemento necesario en tu vida. Este ejercicio se puede hacer
con acontecimientos importantes de tu vida: un despido, un desalojo, un cambio
importante.
Para mí, ninguno de mis amores fue un elemento recortable de
mi vida. Al primero le debo mis hijos, no podría vivir sin ellos hoy. Es
posible que nacieran los mayores, pero veo poco probable que mis peques lo
hicieran si no es por mi estabilidad económica y emocional. Fui feliz mientras
duró, ojos que no ven …
Para él, para el más odiado, la respuesta a la petición que
tantas veces me hizo:
Te perdono, descansa en paz.
Ni que decir que me compenso mi segundo amor. Fue corto pero
intenso. Se cruzaron en nuestras vidas y nos recortaron mucho tiempo juntos. Muchas
risas, apoyos y cuidados. Seguramente hubiéramos disfrutado de la vida juntos
hasta la noche del fin del mundo, donde apareció una persona importante que
creo no recortaría de su vida.
Perdonad para los que no me entendáis del todo, es normal,
este blog es personal, no espero que volváis a leer, yo simplemente, he vuelto.
NOTA: Ves como si hay rap con trompetas, si tu madre lo dice, lo encuentra. Pa ti, rapero, te quiero.
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