Quiero relajarme de una vez, dejar de buscar pasta para
mantener a mis hijos y empezar a pensar en descansar esta cabeza. Una cosa es
seguir estando activa, tener mis aficiones, mi cerda, mis ruedas, mis
artesanías, obras y mis actividades fuera de casa, mi asociación que por cierto
tiene muy buen rollete la gente, lo vamos a pasar muy bien, y otra, estar
siempre buscando fórmulas imposibles para conseguir dinero.
Que no hay más dinero, que esto es lo que hay, que si no
tengo para una cosa, no tengo, que hasta aquí he llegado y bastante es. Estoy muy
contenta de haber hecho volar a mis hijos lejos, de lo mucho que han crecido
fuera de casa, pero es el momento de elegir, o se mantienen en el aire o
vuelven al nido.
Ya sé que quiero ser de mayor, ama de casa. Voy a aprender a
cocinar y a mantener llena la nevera como Dios manda, a limpiar sobre limpio y
a tejer jerséis.
Ya está bien con la media jornada de 12 horas, no voy a tener
mala conciencia por mi falta de empleo y salario, toda la vida he trabajado a
jornada completa y partida y he criado a mis cuatro hijos, sin niñera ni señora
de la limpieza. Es una putada que al final de mi vida laboral no cotice nada
más que por media jornada, pero es lo que hay, no pienso preocuparme, voy a
dedicarme a mis labores.
Bueno, esto lo digo con la boca chica porque al final me
aburro y hay un centro educativo para carpinteros y carpinteras en el barrio, no sé cómo no
lo he visto antes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario