viernes, 8 de julio de 2011

ELE DE LENGUA, EME DE MAMME

No soy Mamen, manque chupen
Yo soy Mamme eso es,
Igual que dice un chiquillo chico dame.

Pa mi tita
Pa mi máma
Pa mis queridos y queridas
Pa mis seres.

Maricarmennnn en tus sueños eróticos
Maricarrrrmmmmeeennnnn en tu cama
Bueno, en mi cama
Bueno en nuestra cama Canijo,
alias “el CANI”


SUICIDA

Nunca diré de esta agua no he de beber, pero mientras tenga uso de razón no me quitaré la vida. Lo malo es cuando se pierde, no la vida, si no el uso de la razón.


Solo conocí a un suicida razonable… convencido, en una planta de psiquiatría, ver HABLEMOS DE LOCOS.


Los demás no saben por qué o la razón es muy pequeña, pero quieren morir.


Yo no, si me pilla un tren tened por seguro que fue sin querer, despiste, tropezón o por coger un billete de 500 € para devolverlo.


Hoy tengo que abrazar en X a alguien que se quedó en tierra. Estoy acojoná,.. ¡joio porculo el niño suicida!.


¿Qué pasa con ella macho? ¿ Qué pasa con tu madre ? ¿Qué pasa con tu padre ? y ¿ tu abuela? ¿ Qué pasa con todos los que te quisieron y te querán ?


Tú te vas, te quitas de en medio y te quedas tan agusto.


¡Si te pillo te doy dos hostias! por hacerle daño a mi niña, que es mu chica y lo mejor que ha parío madre, auque no la parí yo.


Supongo, que no lo pensaste bien, supongo que, estarías en un callejón sin salida...

miércoles, 6 de julio de 2011

EL PAZO

¡Que casa tan grande! y tan vacía...
que miedo da en una casa tan vacía,
menos mal que vienen en dos días.
No salgo de mi apartamento, de noche menos.
Hoy lo hice, llevaba el móvil alumbrando las escaleras.
Cuando llegué arriba, luces, luces...
encendí todas las que pude.
Pero seguía mi casa vacía
y seguía teniendo miedo de verla así algún día...

Ahora se que cuando crezcan, solo podrá ser apartamentos, si no, yo no la quiero por Dios.

Quiero un sitio pequeño.
Con terraza grande e invernadero.


EL PAZO

Amaneció.

Salió del circulo, semidesnudo y volvió en busca de sus amigos. La zona estaba en silencio, la tienda vacía ... !! Habían desaparecido !!.

No le dió tiempo a guardar luto, a llorarles. Se vistió, se abrigó con su chubasquero azul y salió a buscar ayuda.

Al llegar a aquella casa, se encontró a salvo. A la luz del día, todo se ve de distinta forma. La luz del día es un quitamiedos en la carretera de un barranco.

Dentro, ventanas cerradas a cal y canto, muestran la otra cara de una casa grande y señorial, donde habitan seres importantes, ¿vivos ? o muertos.

AMOR DE LENGUAS

5 martes
Bajo la cabeza al suelo
Publicado por lunas bocabajo en 00:30
 



A la Soledad, sin acritud.

Bajo la cabeza al suelo,
para escuchar tus pisadas huyendo.
Antes lo hacías,
corrías, sin mirar
hacia atrás.

Ahora,
Ahora incluso te paras, pérfida sirena de canto trasnochado.

Y me ves a tus pies,
y te ríes.
y te excusas enseñándome tu marfil y encías.

Y pienso,
si intento levantarme,
aunque sea por un momento,
estaré de rodillas. Postrado, derrotado, humillado.

Por eso sigo con la cabeza en el suelo,
a ver si corres de nuevo
y me dejas ser un simple fetichista enamorado.

1 comentario de tu Lengua que te dijo...

Fiel sirena que se retuerce
escondida bajo tu cama
presa de ti
casi se ve morir
cuando vuelves a hidratarla
con el agua justa de un florero
conreada por su cuerpo
con la ayuda de tus manos
grandes
y espera tu vuelta
como agua de julio.

martes, 5 de julio de 2011

LA SANTA COMPAÑA

No había acampado nunca. No conocía los sonidos nocturnos de un bosque. Los crujidos de las ramas, le recordaban a las pelis de terror, pero nunca imaginaría que un animal merodeaba su mochila. Ese bocata de chorizo se huele a kilómetros de distancia si eres zorro.

Hay un pájaro que emite un sonido estremecedor, igual que el grito de un asesinado antes de morir. Por eso yo, india vieja, si he de dormir sola en mitad de un bosque, siempre buscaré la vera de un río. El sonido de sus aguas relaja e impide que escuche todos los demás. Y son muchos te lo aseguro.

No estaba solo, sus amigos lo acompañaban, uno de ellos con experiencia, le inspiraba la confianza necesaria para ir tranquilo por el camino. Un largo día sudando, hablando, pensando y caminando dio paso a una larga noche de silencios.

Todos duermen, pero él no puede. No es fácil coger la postura. Sus caderas son las más puñeteras, todas lo son. No recordaron el viejo truco de hacer un agujero en el suelo a la altura de las caderas y eso les pasó factura en horas de sueño. Además, en ruta no vas a ir haciendo agujeros, como marcas de sendero.

Con lo cansado que está, quizás por ese motivo, no puede cerrar ni un ojo. ¿Un cigarrillo? No, no puedo fumar dentro ¿salir? ¡Que miedo!. No hay nadie en kilómetros a la redonda. No consiguieron llegar al camping y la noche se les echó encima. A la vera del camino abrieron su tienda, esperando que llegara un guarda a levantarla, y con la esperanza de que los llevara a su punto de avituallamiento establecido. Comenzó la noche. Y nadie llegó...

En un camping, los sonidos humanos aportan confianza, pero allí… al silencio del sueños de sus amigos, se le une el silencio total absoluto del bosque. Echó de menos incluso el ronquido de alguno, pero ni eso. Poco a poco, el oído se adapta y el bosque comienza a hablar.

Sonidos como susurros que seguro tienen explicación, pero que su poca experiencia vuelve a recordarle que puede ser algo paranormal.

Son varias voces, no estoy soñando... susurran y rezan juntas muy, muy lejos. Pisadas sobre las hojas de un bicho grande, no sale a fumar, cierra la cremallera y duerme. O al menos lo intenta...

“Será un animal” piensa ¿un animal? ¡que miedo también!. Un búho perfectamente reconocible, que no ayuda a mitigar el miedo. Sigue el susurro lejano y los pies de algo que se acerca despacio… muy lentamente… “¿Estaré durmiendo?” Había escuchado mil historias de la Santa Compaña, por testigos visuales según dicen, según cuentan...

Ni un parpadeo para hidratar sus ojos. Atento a su sentido del oído, se olvida de los demás. Solo ve el techo de su tienda, su oído le avisa, ese sonido no es del bosque. No es un solo animal, corren y paran., no, se acercan.

Pasos metódicos, imponentes, firmes y fuertes se acercan aquí. Muchas historias conocía de estas tierras; muchos mitos y leyendas, pero eran solo eso… habladurías, ¿testigos? Si, todos conocían a uno, pero ninguno lo era.

La Santa Compaña, era un lista de nombres de fallecidas, asesinadas, fotografiadas en vida. Ellas dedicaban su vida a Dios y este decidió darles una segunda oportunidad para seguir en este mundo por los siglos de los siglos.

No es una historia vieja. Ocurrió no hace tanto, hay fotos de las muertas. Como lo hay de muchos asesinados y asesinos muertos. No me gustan las fotos antiguas si no son de edificios. Las de personas, encima fechadas, echo cuentas y solo veo… muertos. Cuando una foto en blanco y negro envejece, se amarillea lo blanco de los ojos y hace que sus protagonistas tengan ojos de muertos y faz de tristeza.

Ya no hay duda, alguien merodea la tienda, son muchos, muchas pisadas. Está paralizado, todo fue muy rápido. Pisadas en círculos escuchaba alrededor, susurros, rezos, no había duda, era uno de esos testigos, no visual, pero si escuchaba a la Santa Compaña.

Cuando estaba a punto de reaccionar y avisar a sus amigos, se hizo el silencio. Absoluto. Quedó de nuevo paralizado, esperando el siguiente sonido. Nada. Ni bosque, ni habitants… Nada.

Pasó un rato, comenzó a pensar que era un sueño. De esos que dices ¿ha pasado esto?

La respuesta puede ser 50% si , 50 % no.

Se arma de valor… abre la cremallera y asoma la cabeza lentamente, con la mirada baja.

Antes de que pudiera reaccionar, a la puerta, silenciosas las monjas le ofrecían una vela, casi irresistible la atracción. Ya estaban en su retina. Sabía quienes eran, sabía que no podía aceptar nada y que tenía que correr, correr y no mirarlas. Pero… algo tenían que lo hipnotizaba... segundos que parecen siglos. Imágenes que parecen sueños.

Un grito a su oído, alguien que lo está viendo a kilómetros de distancia, su igual le grita:

“¡¡Corre!!”

De un salto, sin zapatillas, sin pantalón y sin saco, quedó todo atrás del impulso y la fuerza de ese grito. Corre de la muerte ¿hay algo peor?. Sigue escuchándola:

“¡¡Corre, corre... !!”

Exhausto, casi muerto pero con vida, no puede más. Traza un círculo en el suelo del tamaño de su cuerpo y se abraza las rodillas en posición fetal. Duerme, ahora sí. No puede más. Atrás dejó a sus amigos, sin aviso previo ni na. ¿que les pasará?

lunes, 4 de julio de 2011

A TRABAJAR

Vuelvo al periódico tras mis vacaciones. Piel canela, no chocolate. No me gusta el sol. Protección del 50 y palmeras. Me muevo cual araña buscando la sombra. ¿no se me nota en la piel? Huele, no mires, huele…. huele a sexo. A noches de despedidas sin adioses, con besos, con tiempo, sin prisas, sin pausas. Y se fue. Ya no lo veré en muchos días.

Su recuerdo en la redacción, vacía de noticias por el verano, me hace retorcerme de coraje y deseo. No puedo hacer nada, estoy trabajando y partirá cuando yo termine. Pero saber que está aún aquí, en la ciudad, despierta mis ganas de él. Mi sexo se calienta, necesito ir al servicio ¿vicio? No, es ternura e imaginación.

Casi puedo imaginarlo aparecer por la puerta y con un golpe de cabeza indicarme el camino al baño. Lo veo por todas partes, voy a mear, ya no puedo más.

Abrí la puerta y no puedo creerlo ¡¡Es él!!

-         ¿qué haces aquí  ?
-         ¿por qué tardaste tanto? ¿no me viste?
-         No
-         ¡venga ya! No te hagas la encontradiza. Me viste perfectamente.
-         No, de verdad, pensé que era mi imaginación.
-         Si, imaginación, ven aquí, tócame, bésame, a ver si soy de verdad o no.

No se percatan de donde están, piensan que están soñando y no se dan cuenta. Por la ventanuca de ventilación, todos en el despacho contiguo lo escuchan. Todo.

-         Háblame nena, como tú sabes... mírame. Utilízame...

Al principio, risas y caras de sorpresa de sus compañeros. Pero poco a poco los músculos faciales se relajan colectivamente y todos callan. Nadie está dispuesto a frenar la escena. Será la comidilla de la oficina durante años. Nuevos periodistas entrarán y después de enseñarle su mesa, le dirán, y por esa ventanuca una vez...

Respiración profunda mezclada con carraspeo de garganta. Es un macho quien jadea,       ¿está sola? no puede ser, hay alguien con ella. Otro jadeo más tímido e inocente se escucha al unísono. No está sola, ¡que morro!. Antes de que pueda articular palabra de protesta por la escena tan inusual, sus voces se apagan por el deseo de estar en su pellejo.

Ellas mueven sus pubis en la silla, hacen como que trabajan y no escuchan nada.

Ellos… se miran, no pueden levantarse su pantalón los delataría, se miran, no saben que hacer. Uno no puede más y se va solo al otro baño, tiene cerca a su compañera, que contonea sus caderas, inmóvil. Años deseándola, oliendola, a su pelo con la excusa de una consulta en su ordenador. No puede mirarla, ella también calla y hace como que trabaja. Continúan  los sonidos, las palabras, los olores, e incluso pueden verlos. Ventana indiscreta que actúa hoy como transmisora. Alguien decide avisarla, de todo lo que se oye al otro lado de la pared. Es amiga, debe impedirlo.

-         ¿estás bien?
-         Si, si, mareada, algo me sentó mal.
-         Si, si… mareada. Tienes que salir, llamaron urgente. El fotógrafo te espera, tienes que cubrir una noticia de un muro en no se donde. Se desplomó y ha pillado a tres chiquillos... es urgente.
-         Vale, vale, me lavo la cara y voy.

Al volver del aviso, la redacción está desierta. ¿Que pasó? ¿Un desalojo? Todos buscaron cobijo entre las máquinas, servicios... papeles y tintas. Edificio grande con huecos para todos, solos y acompañados. Todos desaparecidos.

Ella lo siguió al baño y antes de que cerrara la puerta solo, puso el pié y le acompañó. Años de deseo contenido de ambos terminaron por la indiscreción de una loca compañera que no tiene nada que perder ya. Nada la sujeta. Nadie la sujeta. Vuela libre como cometa y él, solo la mira, la escucha y la mima.

Nadie podrá frenarla. ¡No está cuerda la loca. No está loca ni ná, la cuerda!. Nadie sabe donde terminará su locura.

Y al día siguiente...

Silencio y normalidad. Todos tienen algo que ocultar. Coartada conjunta para los amantes, nadie cuenta nada aquí, ni a nuevos ni a nadie.

Todos agradecidos, desde ese día... ¡que ratico tan bonico!.




DÉJAME


Todos los días le digo:



Déjame que me estoy vistiendo,

déjame que me olvide de tu cuerpo…

De tus besos pequeño.

Deja de ser mi dueño.



Caprichoso, piel de oso, hermoso mozo

Buen ojo y mejor amador.



Busca que encontrarás la mujer ideal.

La que siempre te atenderá

No te furruñará.



A mi,

déjame ya,

déjame ya…

¿si?

Si

Déjame.



O pillarás cabreos a diario

Cabreos por no poder dejarme

¡Como me ponen tus reproches!

Me has despertao…



¿si?

No

Has sido tú.



Calla y sigue amándome

Salto en la cama, tú saltas,

Antes dormías inmóvil

pero laLlengua contagia.

Así duerme la lengua.

Así dormirás tú.


domingo, 3 de julio de 2011

MUNCHO DE POQUITO

Un primillo chico tenía esta expresión. No le gustaba la sopa y cuando se la ponían, siempre decía: “si, pero muncho, muncho, muncho de poquito”


Eso es lo que puedo dar.


No buscaré ni pensaré en el futuro. No debes buscar, pero si encuentras sin esperarlo opciones que te den más de poquito, no las rechaces. Déjate llevar por la vida como si yo no existiera. Soy “muncho”, lo sé… pero de poquito.


Agendas imposibles, noches en vela sola, noches en vela solo, no se puede tener menos de poquito. No se puede parar el reloj de uno de nosotros; no es justo que uno avance a velocidad de crucero para pillar al otro.


Dicen que en el camino encuentras respuestas. No se cual es la pregunta, pero caminaré hoy para pensar, para buscar... ¿respuestas? Pregunta y respuesta.


Busca tú también que vas al sitio correcto, donde están todas las preguntas con respuesta.


Entonces escucharás la voz, tú voz, tú respuesta.


Pero el peso de la ley, de mis años de más, será definitivo.


Te obligaré a comer fruta, si es buena para ti.


Te obligaré a buscar un futuro correcto, si es bueno para ti.


Y viviré feliz… al ver a mi niño feliz.

sábado, 2 de julio de 2011

ENEMIGO SOL

Cuidado que el sol quema
cuidado, échate crema.

Cuidado, cuidando
crema te estoy dando.

Aprieto tus muslos para que penetre,
tus amigos miran el sol les mete.

A ti nadie te hará daño, 
ni el sol, no lo dejo yo.

Si no me dejas, no te defiendo.
Si me dejas, me voy yendo.
Si no me dejas, siempre estaré luciendo.

¿ÁNGEL O DEMOÑA ?

Caminando... caminando llegué al final. Jóvenes durmiendo la mona en las tumbonas al sol. No tienen cabeza. ¿no saben que su piel recuerda y les pasará factura?


No puede ser... ¡es él!.


¿Que haces aquí? Pero no está solo. Me reconocerán, todos duermen, quizás no despierten. Busco mis gafas de sol de 3€ en el bolso. Hecho mi pelo hacia la cara y me dirijo hacia él, no puedo dejarlo así y que se queme. Llevo protección de 50.


Me acerco con sigilo, movimientos inmóviles, lentos, de acecho, como un juego nocturno, pero sin el como. Es de noche y duermen. La luna alumbra, mañana será un largo día y el sol te comerá. No puedo consentir que el sol te haga daño.


Estoy aquí, ¡como duerme tan profundo! cansancio y alcohol, sol y juerga.


Pongo crema en mis palmas y comienza la refriega. Que caliente está ¡que gustazo!. El no notará el fresquito y permanecerá quieto.


Su cara roja, preciosa boca, su boca. Su boca bocabajo, aprieta el labio contra la hamaca, babea. Se nota un charco. Sobre la tumbona deja un hueco, por el que respira con dificultad. Siempre la voz tomá, no suelta uno y coge otro, siempre tosiendo.


Mientras comienzo por los hombros recuerdo, mi primer abrazo en la cruz. Brazos en cruz, estiro la crema del hombro al brazo y a la muñeca.


Recuerdo sin imágenes, recuerdos de tactos, de cuerpos, de miedos, de besos. Recuerdo ese primer beso. Era la prueba definitiva, si no me estremecían sus besos, no volvería a quedar. Y me quedé su aliento y sin fuerza. Mi cara y mis piernas con el sexo relajado y húmedo; el mío, el suyo todo lo contrario.


Solo con un abrazo acogedor, tranquilizador, apretón de oso bueno que ronea por su premio, un beso. Recuerdo el miedo que tenía, recuerdo un ángel acojonao, el “demoño” venía por él, se invertirían los papeles, tú el acojonao, tú el ángel bueno, yo ... de MOÑA, te espero.


¡Como está de quemado! y si no vengo, acaba en urgencias con una insolación del 15. Solo toco sus hombros de momento, con mi blanco nuclear en las manos. Más crema en mis manos, las froto, las esturreo, y a por él. Sigo dibujando palomas blancas sobre el lienzo rojo de su piel. Le doy la espalda a su nuca, y bajan dirigentes por su espalda mis manos. Músculos grandes pero definidos y duros. Si te ven gordito los demás es su problema. Yo te veo a ti, al cuerpo de mi deseo. La estética definitiva en los diccionarios de belleza actual… para los simples, a mi me encanta tu piel de terciopelo negro, tu pelo suave sobre tu piel. No es condescendencia, no… es deseo, deseo bajar más, a la zona protegida por el bañador. Y mis deseos son órdenes para mí, ya lo sabes, siempre hago lo que me da la gana, tú te vas acostumbrando, yo te voy conociendo, y me pone mucho tus enfurruñamientos.
Bajo más, que frío, encima te acostaste con el bañador mojado, para pillar un buen resfriado. Contraste de fuego solano y frío en tu ano. En tus testículos, en tus nalgas. ¡Ay! te saldrán algas.
Paso por tus cachetes. La línea de tus piernas también definida, el interior de tus nalgas muy unidas.


SEPARO.


¡Relaja nene, relaja, que hasta durmiendo estás tensionao! ¿juegas a baloncesto en sueños? La crema aquí, para nada a de servir, despierta un amigo chsssss... guarda mi secreto, ¡a dormir!. Envidioso… no hay para ti, queda poca crema, y no hay para ti.


En otra hamaca otro amigo mira ¿es él? No, que va, es este… “chsss a dormir que se despierta mi niño chico”. “Ero baby”, susurro a tu oído.


Cuanta arena entre tus miembros, cuanta en la frontera… allí no, es listo se protege de la arena. Mucha masa muscular pero estos dedos son muy finos, listos, llegarán a todos sitios. Tu sexo, despierta, ¿también se quemó? No, solo la luna de San Juan lo vio. La luna no quema, alumbra.


Refriego y entre sueños, se da la vuelta, ¡no es listo el nene, ni na!.


Más crema en tu pecho, en tu vientre y en tus costillas, en todo y al llegar a tu cara cual mimo, te pinto con mimos.


Te pinto la cara con protección de 50 y al llegar a tus labios un deseo, que me bese y no despierte, que piense que todo fue un sueño, que su ángel o su demoña vino a rescatar sus besos.


Y te beso… sin ser correspondida… sigues durmiendo, te muerdo los labios, te meto mi lengua, me bebo tus babas, me excito, me cabreo y no despierta. No hay forma, nadie responde ¿o si?


Y se aleja el ángel de nuevo, a recorrer el camino de vuelta, este ángel no vuela, pone los pies en la tierra.


Y cuando él despierta, ojos de amigos envidiosos con mucho blanco alrededor del iris, le dicen. “ Nene, ¡anda queee,! ya no nos la presentes, ya la conocemos… ¡Anda queee!”.

viernes, 1 de julio de 2011

UN TEQUIERO

Si no es a los niños, me cuesta mucho decirlo y cuando lo digo, lo hago muyy deprisa, para que no se distinga si digo florero, cartero, panaero....ero.

Pero solo tienes que hacer una cosa para conseguir que yo haga algo. Es decir que no lo haga. No soy tonta ni rubia. Si me dices no te comas una mierda... te hago caso. No te pegues un piñazo en toda la boca... pues no me lo pego, pero si me dices que no tenga ansias, más me entran, no me digas eso... más te lo diré, porque quiero y no me dejo mandar por un agorero.

¿Que no te gusta?... Te aguantas.

¿Que no me correspondes?...  No te lo crees ni tú.

Tanta gente me quiere sin decir nada que sé percibir el olor, el sabor y el tacto de un “tequiero”. El gusto es otra cosa, hay quien le coge el gusto, yo aún no me he comido ninguno.  Pero verlo… lo veo en cada gesto, muchos "tequieros" veo, clarividente que soy. Veo las cosas que provoco.

Que no puede ser... vale, que es un lío... completamente de acuerdo, que pronto se torcerá todo, lo sé, pero… ¿para que sufrir antes de tiempo? ya lo haré cuando te vayas lejos... lo sé.