domingo, 10 de julio de 2016

SIGO NADANDO

Necesito escribir, pero no quiero hablar ni ofender a nadie. Estas cosas que pasan por mi cabeza, debo guardarlas, pero son claras y contundentes.

Abro grande los ojos, solo yo me entiendo.

Cosas que para mí tienen mucha importancia, pasan de largo por otros.

Detalles que yo veo con fuerza, son solo trazos en el agua para muchos.

Lo siento, habla solo mi cerebro, no me escondo, juzga, actúa y no me permite hacer si no está de acuerdo. 

Lo siento, habla solo mi cerebro.

No me gustaría estar en el pellejo de otros, que no son capaces de decir NO, de purgarse y hacer lo que quieren, otros que siguen y siguen besando bocas que no desean, que siguen haciendo el amor sin pasión, otros que no ven lo yo veo, que no saben lo que yo sé, que no le exigen a la vida lo que yo le pido a diario.  

Implacable el tiempo pasa, cinco años desde que empecé a escribir, por estas fechas lo hacía sin descanso, con desespero.

Tengo la sensación de que todo vuelve, de que mi vida no se centrará nunca ya, gira rápido ella, soy un puto ventilador y lo siento por el que no se ponga en mi centro, mis aspas,  expulsan con fuerza lejos a todo aquel que yo no vea, todo lo feo sale disparado de mi vida. 

Nadie tiene la culpa, nadie lleva la razón,  ¿Qué importa? 

Igualmente lo hará, es mi memoria selectiva, es mi verdad, no pienso discutirla con nadie. No pienso perder ni un minuto de mi tiempo, estás fuera, estás fuera y se asume.

Hoy me dijeron que era como Dori, el pez que ayudaba al padre de Nemo a buscar a su hijo, puede ser, yo sigo nadando, sigo nadando y así hasta que siga nadando. 

1 comentario:

  1. ¿blindaje de Mamen? ¿se nos acabo, o van a ser con azúcar sus libros y píldoras? Ojalá que no, entonces no sería Mamen, sería otra cosa.

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