ACEPTANDO LOS HECHOS

Me ha pasado esto, vale, me ha pasado lo otro, vale, me pasó aquello, vale, de acuerdo. Me va a pasar…No, negativo, error. 

Nunca puedes saber lo que va a pasar. Vale que puedes pensar y desear, pero saber no. Saber no porque no es cierto eso de la videncia. Puedes intuir, puedes esperar, gracias al conocimiento y por tu experiencia propia, lo que puede pasar, pero lo mejor es no pensar tanto y no saber. Sencillamente no puedes preguntar si va a pasar una cosa, es generar un estrés en la otra persona que no sabe o peor aún, que te diga cualquier cosa y tú te lo creas para que luego pase o no, según las posibilidades de que ocurra el hecho.

Lo que siempre hago cuando me enfrento a una situación nueva, que es cada año prácticamente, un año monto un negocio de pizzas, el anterior ni recuerdo porque no tengo capacidad para tanta información, mi disco duro es pequeño.

Bueno, lo primero que hago es un análisis de la realidad. No creas que es algo que se me ocurre de pronto, lo aprendí no se dónde que hay que hacerlo. 

El análisis de la situación es importante, porque te ayuda a saber que decisiones debes tomar a continuación.

Una vez hecho esto, puedes hacer mil posibles combinaciones de lo que va a ocurrir, todo eso ha de ser a gran velocidad porque si no echas la tarde. Todo el tiempo debes tenerlas todas en cuenta, y así es como yo predigo el futuro. 

Lógicamente la posibilidad que más me convence en cada momento es la que digo que va a ocurrir, y por eso finalmente ocurre. No porque yo vea el futuro, sino porque veo los muchos futuros que van a pasar y elijo el que más me interesa, invirtiendo todo mi esfuerzo personal para que ocurra ese futuro.

Evidentemente los elementos no controlables pueden hacer que no ocurra lo que yo creo más probable, pero como sé girar a velocidad de la luz, las personas desde el exterior no recuerdan cual era la opción que había elegido, los tengo tan aturdidos que parece que siempre acierto.

Dicho esto, sé exactamente lo que va a pasar en los próximos meses, hay partes de mi vida que me dan miedo por lo desconocidas, por lo nuevo, pero la gran mayoría las he vivido ya. 

Cuento con mi experiencia, que ya tiene tela tener tanta experiencia como la que yo tengo, tantos conocimientos adquiridos de forma empírica, va a dar una lastimica el día que me muera que se pierda tantísima información.

Pero en fin, como las fotos que se guardan en los discos duros, casi todas se pierden. Para que guardar tantas, si luego no tienes ni un álbum.

Si no escribo reviento, ahora voy a intentar dormir plácidamente.