martes, 4 de septiembre de 2012

DE VALDE

Y cuando sientes el desprecio de los que considerabas tus iguales, te das cuenta de que no lo son. Solo unos pocos somos los elegidos para hacer sentir. Solo unos pocos que orgullosos unos de otros no nos despreciamos, al contrario, nos sentimos libres de pertenecer a este gran grupo. Porque somos familia, de la misma subespecie de esta raza humana tan diversa.

Entonces es cuando me doy cuenta de que andan muchos bajo tierra y que hay que descubrirlos para hacer una gran familia de poetas, escritores, bailaores… artistas.

Entonces me doy cuenta de que entre los niños se esconden hacedores de sentimientos, decidores de poesías y escuchadores orgullosos de pertenecer a esta familia.

Entonces es cuando pienso, es el momento de hacer aquí la revolución, es el momento de que todos aquellos niños y niñas sin preparación, sin oportunidades, les digan a los reputados escritores que ellos, si saben hacer sentir.

Entonces es cuando lo veo claro; no todo el mundo escribe, no todo el mundo lee, no todo el mundo sabe escuchar, pero todo le mundo puede hacer una de estas tres cosas bien, a gusto con su papel, orgulloso del que le toque, sea cual sea.

Nace una nueva escuela, la de la Lengua, gratuita, voluntaria y con sede en la calle, que se apunte el que quiera ser poeta, escritor de cuentos, hacedor de letras o escuchador, sentidor o simplemente uno de los nuestros.

Un día quise ser obrera de las letras, no lo he conseguido. No me pagan ni lo harán mientras otros sean más renombrados y reputados. Ahogaré mi frustración de hacerme rica, haciendo lo que siempre hice, trabajar de valde.

ESTE SI QUE ES UN ARTISTA, GUS DE MI ESPECIEEEE¡ OLE TÚ !



OTRO MÁS, OTRO MÁS, EL GUS SE LO MERECE.


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