¡Qué lástima Marcelino, si tú supieras!
No solo nos doblaron, nos domaron y nos domesticaron, sino
que lo volvieron a hacer una y otra vez distintos amos.
No nos duelen los palos ni el hambre, el consumo nos hizo sus
esclavos. Lo que no pudieron años de cárcel, represión y violencia, ha podido
la maquinaria del dinero.
¡Qué tantos años de lucha no sirvan ahora de nada!
Algunos de tus herederos son ahora perros del amo. Otros siguen
peleando pero con pocas esperanzas y mucha frustración.
Solo somos cuidados paliativos.
Qué suerte que murieras a tiempo de no perder las esperanzas
de recuperar. Por entonces aún seguíamos nadando para encontrar orilla. Aquel desespero
es ahora conformismo. Seguimos en el agua, agarrados a un bidón de gasolina
vacío, con el cuerpo embotado, sin esperanza de que nos rescaten.
Volvemos a mendigar el pan a la iglesia.
¿Quién es el dueño de nuestro país?
Casa por casa, hijo por hijo, todos somos del Rey.
Esto es un feudo con un solo rey
europeo. De nada sirve que votemos a los que pueden o quieren cambiar las
cosas. El poder político ha muerto. El rey nos deja al libre albedrío mientras no salgamos de sus dominios.
Mantiene dirigiéndonos a sus bufones de la corte, para que sigamos pensando que somos libres.
LVM
que bueno y que malo lo que hemos sufrido todos y todas en esa mierda de burocracia en la que todo esta lleno de oficinistas/funcionarios para gestionar de 8 a 15, de lunes a viernes, con vacaciones pagadas. Habria que ir engrasando lo que yo me sea, arrancando adoquines dela calle, cavando zanjas, escuchando musica, mandar a la mierda a esos sindicalistas de teatrillo, vividores de mierda. Mamen, no te confues, a muchos ni nos domestiacaron, ni nos dobladora ni pudieron con nosotros, tenemos nuestras dignidad en nuestras lagrimas nocturnas.
ResponderEliminarun beso grande para ti.
yo si me siento domesticada querido Anonymous
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