El quejido de mi pueblo
protesta porque recuerda
como hace ya mucho tiempo
que no se viste su mesa.
Arrastrando sus cadenas
colgando sus hipotecas
nuestros niños se rindieron
ya nos buscan sus galletas.
¿Mordernos unos a otros?
no somos muertos vivientes
ni asesinos en cadena
¡luchad para defenderse!
No duermo, escucho la muerte
en vida de nuestra gente,
se levantarán los puños
sin guías ni dirigentes.
Ya perdimos el futuro
solo quedan sus cabezas
¿Dónde está nuestro dinero?
¡SIENTA A MI NIÑO EN TU MESA!
No hay comentarios:
Publicar un comentario