La gente tiene miedo a perder el tiempo. Yo, como lo tengo
todo perdido, nada de eso me preocupa, consumo el poco que tengo lo mejor
posible. Tumbo mis días y no me paro a pensar tonterías de esas. No me interesa
para nada iniciar una relación, así o asao, esperando que salga bien porque si
no, he perdido el tiempo.
Hay personas que rompen sus relaciones, porque dicen que no
van a ningún lado y que pierden el tiempo. Yo ya se que no voy a ningún sitio a
parte del nicho cuando llegue mi momento.
No necesito ni romper y hacer nada.
Me aburren las excusas, darle vueltas a las cosas, no poder
y querer, querer y no poder. Ya me cansé de luchar contra lo inevitable. Envejeceré
como todo el mundo, haciendo mil cosas y viviendo mil aventurillas que me harán
pasar mis días lo mejor posible.
Al menos me libré de los monstruitos come-sesos, que además
de recordarme mis quehaceres me hablaban sin parar de repetir muchas veces las cosas.
Ahora, hablo sola.
Nunca pierdo el tiempo, pasan mis días con o sin compañía.
Esto me suena a una canción de Alaska y los Pegamoides, que vieja soy ya.
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