viernes, 20 de noviembre de 2015

ARTISTA TONTOELCULO

Todo lo que digo está basado en hechos reales, te lo juro. 

Está mi ciudad llena de tontoelculos y tontas… ¿cómo se diría en femenino?

Son personajes que cuando se dan a conocer, cambian hasta el tono de su voz al hablar con nosotros, los seres humanos vulgares que vamos caminando por el mundo como un peatón más.

Los que no queremos ser como ellos ni ataos, ni que nos paguen, en realidad lo que tenemos es pura envidia. Cualquier bicho viviente normal querría ser como ellos.  

Los tontoelculo están por todas partes. Se retroaliementan entre ellos, diciéndose entre ellos lo bien que lo hacen. Los artistas de mi ciudad, en su gran mayoría, son tontoelculo y si no lo son es porque se quedan en su casa.

Conozco muchos artistas que nadie ve. Que son de los buenos y hacen cosas y a la vez son tímidos y retraídos. Humildes.

Yo no soy retraida, que va, pero no me mezclo con tontoelculos, porque entre otras cosas no me llaman. No me permiten participar de sus actuaciones porque simplemente se me ve a la cara descubierta lo que pienso de ellos.

No puedo, no quiero, no puedo, entrar en su círculo. 

Sobre todo porque no lo intento. 

Si alguna vez me mezclé con ellos, es simplemente porque no los conocía. Pensaba que eran personas que comparten una afición, la de escribir, actuar, hacer el gamba.

Que va, que va, por Dios, son tontoelculos profesionales.

Bueno, yo me rozo y me mezclo con la gente joven, que como los perrillos de chicos todos son bonicos. Me gusta estar a su lado, me invitan a participar y voy, porque son auténticos y no tontoelculos como otros.

Las caras y los nombres de los tontoelculo profesionales es conocida en nuestra ciudad, pero ¡qué salgan del pueblo a ver qué pasa!

¡Qué mala soy! cualquiera diría que soy una resentida porque me han echado de todas partes, envidiosa por no igualarlos en valía, rabiosa por ser abandonada a mi suerte, frustrada por no ir todos los jueves a un bar que estaría vacío si no es por los tontoelculo,  a actuar gratis a cambio de un poco de alimento para el ego.

¡Qué pena que no hagan negocio conmigo!

Solo por unos aplausos merecidos o no. Total, hoy por ti mañana por mí.

Bueno, a mí, pocos aplausos y muchos abucheos, supongo que lo haría como el culo.

¿He dicho culo en este texto? Si. ¿Verdad?

La verdad, que hoy me vi el culo duchándome en el espejo y pensé:

-          ¿Macho con los años que tienes y que sea el cerebro el que te domine, que subas y bajes a la orden de un puto manojo de sesos?

Otros culos de gimnasio, no tienen tanto dominio y entrenamiento.

¡Hostia! ¡Hablando de culos como coño voy yo a conseguir algún día entrar en su círculo!

El día que me llamen les diré:

-          ¡ME CAES MAL!

Igual que ayer le dije a Araceli:


-          Claro que sí nena, encantada, con vosotras donde digáis. 

LVM

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