Ahora miro a Gatochico dormir y pienso en lo mal que lo
pasaría anoche. Se escapó y pasó el día más frío y lluvioso del invierno en la
calle. Con su noche. Lo miro y pienso: ¡Qué feliz!
¿Qué necesita un gato para ser feliz? ¿Qué necesito yo?
Necesito salud para trabajar. Trabajar para conseguir techo y comida.
Un cocinero que me cocine también estaría bien, pero no sé
si es miedo a los hombres, o no sé, me acostumbre a no follar y ahora cada vez
que pienso en volver a hacerlo, me da un poco de grimilla, pereza …
Dije que no lo haría hasta que no me asegurase de que la
otra persona está completamente enamorada de mí, locamente enamorada. Pero ahora
pido más.
Es muy fácil enamorar a una persona, a veces se enamora
sola, pero eso no garantiza que la hagas feliz.
Yo quiero que me haga feliz, se enamore o no, ya no creo en el amor.
LVM
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