NI UN DEDO

Ahora mismo podría currarme un erótico que tengo en papel y posiblemente levantaría algo más que ampollas, pero no pienso mover ni un dedo, que va.

No pienso evitar ni propiciar nada de nada.

Ha perdido la gracia para mí. La seducción ya no me divierte. En este momento de mi vida, he decidido que las cosas que ocurran serán porque no he podido evitarlas.

Siempre fui de tomar la iniciativa, tomar decisiones, cambiar de rumbo, correr. Pues ahora no. he aprendido a vivir sin acelerarme y soy mucho más feliz.

No me como una rosca desde julio, eso sí, no me importa reconocerlo.

Ya me han comunicado que soy muy arisca, lo sé, puedo parecerlo ahora.

Pido perdón a mi primer amante al que mandé el otro día a que se lo follaran. Lo siento. No llevaba razón. Sé que me lees y retrocedo para pedirte disculpas. Tú solo me dijiste lo que me dicen a diario miles de millones de personas, hasta el cartero que me trae las cartas me dice que tengo que leer más y yo le contesto ¿dónde hay que firmar?

Pero no pienso mover ni un dedo, es mejor así, que sigamos enfadados, tú en tu cama y yo en la mía. 

Y tú. Y tú. Y tú. Tú también...

 Cada uno en su cama y yo en la mía. 

Amen.

LVM