jueves, 21 de abril de 2011

YOOOOOO, YO SOY OBRERO

Abre el enlace y canta desafinando y altoooo… si quieres…


Yo no maldigo mi suerte
porque obrero nací.
He disfrutao toa la vida
y así me siento feliz

Otros hacían puzzles de cuatro mil piezas.
Desde chica me ponía,
Con una buena protesta.
Con una buena protestaaaa

Bajo al encierro jugando,
porque del cole volví,
Mi mare está protestandooo
“veniros a come aquí” ( Iartel con fartasss a la puerta de mi casa).

Y cuando tengo una pena
Lanzo al viento mi cantarrr

Soy obrero, y forjé mi corazón con una protesta.
Soy obrero, y si esto te molesta tira de esta.
Soy obrero porque a mi nadie me manda…
Y solo quiero el sonioooo… de mi gargantaaaa.

Compañero… que te van a dar lo mismo pide lo tuyo!!.
Y al patronnnm decir  yo quiero y  repetir al mundo entero:
Yoooo… yo soy obrero.

Yo soy obrero porque a mi nadie me manda
Y solo quiero el soniooooo deeeeee mi gargantaaaaa

Compañero… que te van a dar lo mismo pide lo tuyo!!.
Y al patronnnm decir  yo quiero, repetir al mundo entero:
Yoooo… yo soy obrero.

Yoooooooooooo ooo oooo ooo, soy obreroooo.


Los que protestan oficialmente no son los mismos de antes, pero tampoco nosotros somos los mismos, tampoco nosotros tomamos la iniciativa de protestar, descargar rabia, liarla...

Bueno, no todos. Algunos no se conforman con tener presa su libertad, presa de nuestras deudas. A precio de oro pagamos nuestras casas. Oro del que cagó el moro. Mira estos, como se lo pasan, yo quisiera estar en sus filas...


LENGUAVIVA, obrera de las letras quiero ser.

3 comentarios:

  1. Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.

    ResponderEliminar
  2. Siii, yo tambien jajajaja. Eso demuestra que estamos igual de chalás! Pero eso sí, la letra ¡verdades como puñooooos! Yooooooo yo soy obreraaaa

    ResponderEliminar
  3. Recuerdo aquellos encierros. Le decían a mi madre(" si tu no tienes niños de guardería, pa que la pides?" Al final mis hijos, fueron a es guardería, a la que me pedí yo con ocho años, en esos encierros. Jugar a las damas con los viejos. Que nos digan bajito al oído, a los niños. Venga, que podéis correr por los pasillos, cuando más se nos escuche, antes nos hacen caso. Que tiempos, no hay na como un buen encierro. Colchones, Albóndigas en caldo, picoteo, y como no, hasta barbacoa. jajaja

    ResponderEliminar