miércoles, 14 de septiembre de 2011

LA INSOLENCIA ES MI DEFENSA

Ahora si te comprendo, por eso solo puedo pedir disculpas.

DISCULPAS (texto censurado y guardado como con tantos otros)

Disculpa por todo el daño que te hice,
Disculpa por pedir inmediatez y lectura de “celebro”,
cuando tú esperabas pacientemente dos semanas.

Disculpa, disculpa, disculpa…
si los dejas, si me dejas, si me abandonas
otros recogerán los frutos de tus enseñanzas,
otros tendrán la paciencia y la paciente.

Disculpa Canijo, discúlpame para siempre.


No podía darte más entonces,
estaba llorando a un muerto,
insignificante me siento a tu lado,
por tu grandeza.

Vicios que ayudan a sobrevivir,
mirar las cosas con mi cristal para mejorarlas,
aunque cambien de color,
aunque todos digan que es verde y yo lo veas azul,
para verlas más bonitas,
para que no sean tan feas.

Mis iniciativas siempre fueron para los demás,
cuando es para mi, me dejo llevar.

Porque siempre pienso “ya llegará” y si no llega,
¡YASTA!,
otra opción mejor o peor vendrá,
no decido para mi,
por si me equivoco p’a na,
así será, lo que quiera ser que sea,
así será lo que me echen, como a los cerdos
como un berberecho.

Desgarros tengo en el coño,
que ayudaron a nacer a mis hijos,
hay desgarros necesarios y benditos.

Si que lo sé, lo sé, en eso no llevas razón,
se que estás tan relleno porque no te cabe el corazón.

En el pecho. ¿insolvente? ¡si tienes para prestar a la gente!.

Banquero de amor, cobra intereses,
que no se puede dar a manos llenas,
y no quedarse ni una moneda,
que al final te lleva a la ruina,
a la soledad del solo,
a tu Torre del Oro.


(la de Jaén, que todo no va a estar en Sevilla, pisha)

2 comentarios:

  1. muy buena poesia pero hay tienes una mia inedita te la dejo aqui aunque la voy a colgar ahora mi blog. Se llama duerme. Espero que te guste como tanto me ha gustado a mi. un saludo.
    Comencemos la historia:
    la historia de un gañán
    o la de un truhán
    que roba el amor a contrabando.

    Amor que desata la quema
    de los corazones clandestinos
    al paraíso del sueño sin destino.

    Comencemos hablar del sueño
    ¡Ay!, el sueño...
    me da pereza solo de pensarlo.
    Soñemos...

    Soñar sin destino...
    ¿Con que sueño?

    Mi corazón se quedo arrugado
    como una servilleta después del café
    y mi ojo se queda manchado
    sin la niña de la blanca fe.

    ¿De dónde parte mi espera?,
    ¿De un sueño?
    O del simple juego
    del autobús y la cochera.

    Silencio... Silencio
    sueño.... duermo.

    Duerme sucio corazón
    duerme antes que te roben
    las sombras sin razón.
    Duerme...

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  2. Este comentario llega con retraso, ya te dije anoche que me gustó bastante, pero más aún me gustaría saber porque y por quien escribes eso. siempre hay un porque y un porquién, yo lo se, yo escribo, siempre lo hay.

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