FUMO, FUMO Y MI ROPA NO HUELE A HUMO

Aún a riesgo de echarme encima a la mitad de mis lectoreras ... estoy encantada con la Ley. No me paro a analizar parámetros económicos ni de otro tipo. No he contrastado mis fuentes, ni pienso. Solo sé lo que veo, que la calle ha vuelto a la vida.

Sé que hay hosteleros que adaptaron sus negocios, a esos les dieron ayudas o facilidades para sus terrazas. A los demás les diré, que no creo que sus ingresos mermaran. La gente ahora fuma un poco menos y se sale a fumar a la puerta y punto. Las terrazas están llenas ahora… en invierno al solecito y en verano al fresquito.

Voy más lejos, yo creo que hasta apetece más salir a la calle, gracias a la Ley. La vida en la calle alegra los corazones. No sé por el norte que pensaréis pero yo tenía una prima en Barcelona que no sabía qué era un discoteca de verano. Era joven, si, pero también poco frecuentes en su ciudad.

Esto es una gran feria, a la calle todo el mundo.

¡Qué bonito es ver un concierto o un monólogo nítido!. ¡Qué bonito que se hagan descansos para fumar!, y que público y artista fumen juntos. Se descubren fallos del sonido, matices del lenguaje según la geografía española. ¿Por el norte no sabe la gente que son los alcaparrones? Increíble ¿berenjenas de almagro? que bestialidad…

Fumando se comenta, se habla, se interactúa.. yo en el fondo, no pensé que fuera así, pero soy bastante tímida. Tengo miedo al error, al olvido, a comenzar una frase para cagarla, a decir un pensamiento-Lengua no adecuado.¡ Ahora con el blog hablo tanto! que luego en la vida real, suelto cosillas uummm ordinarias, ... mejor me callo. Observo, analizo y después p’a na, olvido otra vez.

Pero sobre todo mi JÚBILO es total cuando pienso en mis hijos, no sé si serán o no fumadores, pero si consiguen no serlo, no tendrán porqué sorber por sus labios, sus dientes , su traquea y su ropa, el humo que escupa otro joven, o peor aún, un viejo verde.

Que conozcan la cultura del tabaco por los museos, como también debía ocurrir con los perros y sus excrementos.... con licencia, sean o no peligrosos, como si fuera una adopción, con certificado de idoneidad y compromiso de reparación y limpieza de daños. Así, los perros, quedarían para los viejos que necesitan compañía o para la gente que de verdad los quieren, y los cuidan, y limpian sus mierdas con cariño. No pasan vergüenza. Y mucho menos llevan la bolsa para disimular.

Me visitan unos amigos y les muestro el relato en papel, a boli rojo, que nunca hay azul en casa. Tachaduras, pocas… pero todo va textual, se ríen y dicen: “mañana, a ver si sale”.

“¿Sois fumadores?” responden por orden… uno si, uno no, otro neutral, antes dijo que votó en blanco y eso que era su primera vez, o sea que ni fu ni fa, dice.

“NI FUMAS NI FARTA QUE TE HACE ¿NO?”, risas por respuesta, jajajajajaaj

A ver, todos los no fumadores que se salgan de nuestras terrazas ¿dónde estaban con el frío? ¿eh?
Escribo a mano y se ríen, esperan que todo salga tal cual…¡¡viva la vida en la calle!! La historia del tabaco… a los museos.

TABACALERA ESPAÑOLA ¡¡ARRUINARRRRLAAA!!


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