Se que te da coraje que te diga esto pero es que no espabilan,
son tontos.
Están solos siendo maravillosos cuando hay otros, que con lo
esperpentos que son, se agarran como una garrapata al primer huésped que se le
acerca.
Siempre tienen a alguien por su insistencia.
No dejan ver, ni respirar, ni pensar, ni valorar. No hay
manera de que suelten su presa.
No tienen más que defectos, pero se les justifican.
Mientras estos pobreticos, con cualquier chuminá los
abandonan y ellos no hacen nada por evitarlo. Con lo difícil que es quitarse de
encima una garrapata de las otras.
Todos ven lo que tú no ves. Todos ven al fantasma, tú solo
en ocasiones.
La diferencia entre una persona de valía y un orco de estos,
es que los primeros no necesitan a nadie y no se conforman con cualquier cosa.
Pero al final, los segundos son los que están siempre acompañados, habitualmente de
personas de valía.
¡Qué penica de verdad, si yo pudiera hablar!
Ya no soy sincera como antes, que va.
Prefiero mentir un poco y llevar una vida tranquila.
Como mucho, observo y callo.
Ni hablo ni paulo.
¡DISCREPCIÓN!
LVM
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