Leo cosas escritas de mi puño y letra y no recuerdo nada. Rompo mil quinientos papelicos, y me quedo agustico. Otros archivos de word, sin terminar. Ya me dejan publicar más de uno, pero es un no parar, que no puede ser estar todo el día aquí hablando, sin salir, de esta puñetera torre de marfil.
Leo, lloro .... y esto? ... leo de nuevo. ¿todo eso salió de mi cabeza? Que mujer más atormentada esa lengua. Tendré que librarme algún día de ella.
O que solo escriba, palabras de amor, humor, terror, protesta, feminismo y cuentos para niños.
Todo figurado, el truco estará en no contar nada de mi realidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario